Tu cabello se divide en dos cascadas color obsidiana intenso que cae sobre tus tan pulidos hombros cuales rocas sacadas del más cristalino río.
Te veo a lo lejos anhelando tener tu presencia junto a mí en los momentos que desearía tener una compañera de vida con quien sentirme fusionado.
Eres magnética como un imán atrayendo mis ojos ante tu alma tallada en diamante traslucido, esas cejas hechas a mano con tinta china tan finas y perfectas, una nariz pulida por manos de ángeles impactando belleza en tu rostro, una belleza superior a mi fuerza.
Cuando miro tus labios me doy cuenta que, si se unieran con los míos, la Tierra dejaría de girar en el tiempo de duración.
Ríos por encontrarse
Tu cabello se divide en dos cascadas color obsidiana intenso que cae sobre tus tan pulidos hombros cuales rocas sacadas del más cristalino río.
Te veo a lo lejos anhelando tener tu presencia junto a mí en los momentos que desearía tener una compañera de vida con quien sentirme fusionado.
Eres magnética como un imán atrayendo mis ojos ante tu alma tallada en diamante traslucido, esas cejas hechas a mano con tinta china tan finas y perfectas, una nariz pulida por manos de ángeles impactando belleza en tu rostro, una belleza superior a mi fuerza.
Cuando miro tus labios me doy cuenta que, si se unieran con los míos, la Tierra dejaría de girar en el tiempo de duración.