El Uru Revista nº 39 | Page 8

transitan lugares comunes y ripiosos, ajenos a la calidad que hubiera merecido el tango. La quinta letra habría sido escrita en inglés y es obra de Olga Paul. Habría sido publicada en 1937 bajo el título de “The Masked One” (La Mascarada) con un argumento sospechosamente parecido a “Siga el Corso” de Aieta y García Giménez. Gerardo Hernán Matos Rodríguez, nace en Montevideo el 18 de marzo de 1897 y muere, también, en Montevideo el 25 de abril de 1948. Fue músico, pianista, perio- dista y compositor de tangos y canciones criollas uruguayas. Fue integrante de la fa- mosa Troupe Ateniense, agrupación carna- valera, que fue un suceso en Montevideo, no solo en carnaval, ya que esta troupe te- nía actuaciones durante todo el año. Entre otros, integraron el conjunto, Víctor Soliño, Ramón “Loro” Collazo, los hermanos Raúl y Roberto Fontaina y su hermano Juan Anto- nio. En 1917, Becho, que por ese entonces era estudiante de arquitectura, ejecuta por primera vez su tango, ante sus compañeros en la Federación de Estudiantes del Uru- guay, unos días antes de su estreno oficial en el Café La Giralda. Pag 8 Además de La Cumparsita Matos es autor de 75 composiciones más, algunas de ellas muy conocidas. Entre sus tantas composiciones tiene un tango que para él es muy especial, porque se lo dedica al Club Nacional de Football, club del que era orgulloso hincha, tanto era así que él se presentaba diciendo “aquí llega un tricolor”, el tango en cuestión se llama “Nacional For Ever” y lo compuso cuando el club tricolor logró la Copa Uruguaya en propiedad. En 1947 compone un guion para una película titulada La Cumparsita, y le vende los derechos a los estudios San Miguel, de Argentina, aunque la película nunca fue realizada. El tango La Cumparsita está cumplien- do 100 años de vida, a lo largo de los cuales ha sido incluido en, aproximadamente 300 producciones cinematográficas y televisi- vas a lo largo del mundo entero. Además no hay músico o cantor de tangos que se precie que no haya hecho alguna versión del himno de los tangos como muchos lo llaman, incluso algunos músicos no tangue- ros, también, han hecho su propia versión de La Cumparsita. Sobre su tango, Matos Rodríguez comentó: