EL SEÑOR DE LAS SOMBRAS (Biografía no autorizada de Alvaro Uribe) 1 | Page 13
por un banco. Si embargo en el lapso de la diligencia, la
Aeronáutica expidió un certificado de disponibilidad de $20
millones para la contratación del estudio. Al contrato se asoció a
un ex alcalde de Bogotá, Aníbal Fernández de Soto, quien
demostró posteriormente que su nombre fue utilizado de mala fe.
De otra parte, el Fondo Nacional de Proyectos para el Desarrollo
recomendó no dar a particulares la realización del inventario
físico, que pueden hacer los mismos empleados del
departamento. Al excluir el inventario físico, el monto del contrato
se reduciría de $43 a $18 millones de pesos. Se acordó esta
reducción, pero a pesar de todo se suscribió por la suma inicial. "El
contrato fue suscrito a un año, pero un llamado 'profesional B',
que no se sabe quien es, aparece con una dedicación, en
semanas, de doscientos quince (cuatro años siete semanas) a
razón de $6.005 cada una, para un sueldo de $1.291.075; un
'profesional A' quien según el contrato, trabajará doscientas
veinticuatro semanas (cuatro años 16 semanas), con un sueldo
semanal de $6.928 para un gran total de $1.551.872; un jefe de
zona cuyo nombre se ignora, gozó de doscientas catorce semanas,
con un sueldo semanal de $5.543, para .un total de $1.186.202.
"Al suscribir el contrato entre el DAAC y Colasesores Ltda., por
$43.627.743, se autorizó un sueldo durante 26 años". Uribe Vélez
firmó un contrato por dicha suma con Colasesores y luego pidió
permiso a la Presidencia para poder suscribirlo. El 3 de marzo de
1981, Horacio Moscoso Jefe de la División de Almacén del DACC,
empezó a colaborar en la pronta ejecución de ese acuerdo, y en
mensaje dirigido a Uribe Vélez dijo que era ‘indispensable
comunicar a la entidad competente del gobierno la intención de
contratar una firma particular’ y le recomendó ‘no manifestar que
ya está seleccionada la firma sino el hecho de que va a celebrarse
contrato con una firma particular que tiene el visto bueno y la
financiación del Banco Mundial’. “En nota marginal manuscrita
Uribe Vélez le pidió a su antiguo asesor jurídico, doctor Hernando
Herrera, 'considerar esto para el contrato'. "Cinco meses más
tarde, el 11 de agosto del mismo año, se firmó el contrato 3403
por $43.627.743 entre Álvaro Uribe Vélez como representante
legal de la Aerocivil, y Gustavo Torres García representante legal
de Colasesores Ltda.”. La investigación de la Procuraduría señaló
que Uribe había firmado un documento que requería la
autorización previa de la Presidencia de la República, y formuló
13