Literatura
El Dromedario
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leyeron. Para quienes lo leen por primera vez, es como un portal hacia la literatura latinoamericana, hacia una estructura de escritura nueva, en donde las recetas nos llevan de la mano por nuestra historia.
“A través de esta alegoría que vincula con maestría los sentimientos y los elementos culinarios, Laura Esquivel conquistó el parnaso de la literatura, construyendo un relato que se asienta en la tradición del realismo mágico, se recrea en la cultura mexicana y que traspasa todo lo anterior para convertirse en una novela universal, una parte del imaginario colectivo, un clásico” MeGustaLeer.
Para los interesados, es un libro que se encuentra a menudo en la repisa de alguna tía, biblioteca o librería e incluso entre los pdfs de internet. Opciones hay. Y si aún estás de pelea con los libros… existe una película. Un pajarito me dijo que no tiene tantos detalles como el libro, pero parece que no está mal.
Y hasta aquí llegamos. Les deseo un feliz mes, que busquen, encuentren y disfruten su cálida comida lectora y cocinen dulces recuerdos.
Reflexión
Queridos lectores: Vamos a hacer un punto de reflexión sobre nuestra ¿incomodidad de estar en casa? de no poder salir, de NO socializar con absolutamente nadie distinto de nuestro núcleo familiar más cercano. Hace unos días hablaba con unos conocidos que me decían que es bueno volver a la enseñanza híbrida porque así uno se despierta completamente, interactúa de cerca con otros seres humanos en la tierra y claro, ahí me refiero no solo a comunicarnos por el teléfono, sino a salir de la casa y, en mi caso, a lavarme el pelo; todos los días nos despertamos, nos bañamos o simplemente nos echamos agua en la cara, nos vestimos o nos ponemos un saco para que no se vea que estamos en pijama frente a la cámara del zoom o del Google Meet.
Desayunamos o nos tomamos una simple taza de té y ¡A sentarnos a empezar el día! Antes de la pandemia nuestra rutina era otra, bañarnos o no, peinarnos o no, ponernos el UNIFORME, ahora los que asistimos a semipresencial no podemos disfrutar de salir a la recreación a contar chismes con nuestros amigos, a jugar futbol, a comernos un crepe con Nutella y helado de vainilla ¡AY TAN RICO QUE ERA!ya no está la idea en nuestras cabezas por lo menos en mi caso que siempre me da pereza pararme de la cama pero sabía que lo tenia que hacer, que era un pequeño “sacrificio” poner mis pies en el piso
Por: Maria Francisca Araos
cama pero sabía que lo tenia que hacer, que era un pequeño “sacrificio” poner mis pies en el piso frio de madera para poder llegar al colegio a jugar con mis amigos, a saludar a todos, a acordarme que no hice la tarea de Sociales para ese día etc.
Ahora Piensen:
¿Les gusta estar sentados tantas horas frente al computador? Yo me canso
¿Qué extrañan del colegio presencial? ¡Yo muchas cosas!
Por: Colette Nassar
Opiniones