El diario de Anna Frank | Page 133

Gentileza de El Trauko http://go.to/trauko Se murmura un poco menos de Peter y de mí. Ambos somos grandes amigos, estamos juntos siempre que nos es posible, y hablamos de todo y de todos. Cuando abordamos temas delicados, nunca necesito recurrir a la moderación, como sería el caso si conversara con otros muchachos. Estábamos hablando, por ejemplo, sobre la sangre, y de ese tema pasamos al de la menstruación. Él considera que nosotras, las mujeres, somos muy fuertes. Pero ¿por qué? Decididamente, mi vida aquí ha cambiado. Ha mejorado mucho. Dios no me ha abandonado, y nunca me abandonará. Tuya, ANA Sábado 1° de abril de 1944 Querida Kitty. A pesar de todo, sigo encontrándome frente a las mismas dificultades. Sin duda ya sabes a qué me refiero, ¿verdad? Anhelo tanto un beso, el beso que me hace esperar. ¿Me considerará todavía como una mera amiga? ¿No soy nada más para él? Tú sabes bien que soy fuerte, bastante fuerte para llevar sola la mayoría de mis pesares. No estoy acostumbrada a compartirlos con nadie; nunca me he confiado a mamá. Pero, al lado de él, ¡cómo me gustaría apoyar la cabeza en su hombro y quedarme quieta! —Ese sueño de la mejilla de Peter no me abandona; imposible olvidar aquel instante en que todo se volvió infinitamente hermoso. ¿Y él? ¿No lo desea tanto como yo? ¿No será que la timidez le impide confesar su amor? ¿Por qué me quiere tan a menudo a su lado? Dios mío, ¿por qué no dice nada? Es mejor que me calle. Me tranquilizaré. He de encontrar la fuerza necesaria y, con un poco de paciencia, quizás eso llegue por sí solo. Pero hay algo que me tiene mortificada: doy la impresión lamentable de correr detrás de él. Siempre soy yo quien va hacia él, y no él hacia mí. Pero se debe a nuestras habitaciones. Peter no comparte la suya con nadie, yo sí; y él seguramente ve eso como un obstáculo. ¡Todavía debe comprender muchas cosas! Tuya, ANA Lunes 3 d e abril de 1944 Querida Kitty: Contra lo habitual, vas a recibir una carta consagrada por entero a la alimentación; porque este problema no se plantea únicamente en el anexo en realidad, sino en toda Holanda, en toda Europa, por doquiera, y sigue siendo un factor primordial. Durante los veintiún meses que hemos pasado aquí, tuvimos diversos "ciclos alimenticios"; te explicaré de qué se trata. Durante cierto período nos vemos obligados a 129