ARTÍCULO TÉCNICO • SALINIDAD: CONSIDERACIONES DE MANEJO EN NUTRIGACIÓN ®
Valores normales de un agua
de riego
Estos parámetros son útiles mien-
tras indiquen una situación y pueda,
por tanto, tomarse una determinada
acción: La C.E. es una medida indi-
recta de la cantidad de sales presentes
en el agua, no indica necesariamen-
te un nivel de sales para nutrición,
pues existen varias sales tóxicas, no
deseables, que están lejos de ser nutri-
mentales. La mayoría de los cultivos
soportan hasta 3 mS/cm o DS/m, sin
embargo, existen diferentes valores
para cada especie y dentro de especies
hay cultivares especialmente sensibles
a niveles de C.E. relativamente bajos;
a estos valores debemos sumar los
aportes por los fertilizantes emplea-
dos, siendo la sumatoria total de los
aportes del agua y de los fertilizantes,
el valor aportante final de C.E.
Exceder los niveles tolerantes gene-
ra exposición de las plantas a estrés,
con el seguido incremento en procesos
respiratorios, que finalmente inciden
de forma directa en la reducción de
los niveles de rendimiento de los culti-
vos, es decir, afectan directamente la
rentabilidad de los cultivos y la salud
de los suelos.
Los sólidos totales disueltos, TDS:
comprenden las sales inorgánicas
(principalmente de calcio, magnesio,
potasio y sodio; bicarbonatos, cloru-
ros y sulfatos) y pequeñas cantida-
des de materia orgánica que están
disueltas en el agua. Representan
una medida de la salinidad aparen-
te y con frecuencia se determinan
indirectamente al medir la conducti-
vidad eléctrica C.E. Son además un
valor importante para el diseño de
sistemas de riego y nutrigación, indi-
cando necesidades de filtrado entre
otros aspectos.
Otro factor importante es la Rela-
ción de Adsorción de Sodio (RAS), que
indica la relación de sodio presente con
las sumatoria de calcio y magnesio.
Na (meq / L)
RAS=
√Ca (meq / L) + Mg (meq/L)
2
Altos valores de sodio generan
daño de características físico-quí-
micas de los suelos, por la adsorción
excesiva del ión en el complejo coloi-
dal, pudiendo acumularse en el perfil
del suelo. Esto modifica la dinámica
de infiltración de agua, sin embargo,
los niveles de calcio y magnesio ate-
núan el efecto de sodio, por lo que es
primordial el valor de RAS para este
análisis, del que dependerán las estra-
tegias de riego especialmente.
Otra importante información es
la cantidad de cationes y aniones,
pues además de identificar aportes
nutricionales, y determinar la com-
posición real de los aportes de C.E.,
permiten determinar comportamien-
tos y estrategias para diseñar un plan
nutricional. Dependiendo sus niveles
podemos encontrar algunas sales con
riesgo de acumulación, que pueden
generar toxicidades o desequilibrios,
entre ellos:
Sodio. Se ha determinado que
es un nutriente no esencial para la
mayoría de las plantas cultivadas.
Cuando es extraído por las raíces se
puede acumular en las hojas, donde se
concentra y causa toxicidad, prime-
ramente en las hojas adultas, donde
permanece el tiempo suficiente para
acumularse y generar daños como
quemaduras y tejido seco, que se in-
crementa de los bordes exteriores al
centro de la hoja. Así mismo, el sodio
excesivo genera variaciones negativas
sobre la estructura de los suelos, mo-
dificando e incluso dificultando los
procesos de riego.
Cloro. Es uno de los elementos que
más abundan en las aguas de riego,
donde aparece como anión cloruro
(Cl-). Cuando su concentración es
muy alta, puede generar caída de flo-
res, frutos, hojas y reducción del cre-
cimiento de la planta. La toxicidad
de cloruro comienza por un amari-
llamiento de las hojas, que conduce a
la necrosis de ápices; también produ-
ce bronceado. El geranio, la lechuga
y la poinsetia son plantas sensibles
a la toxicidad del cloruro; el clavel y
el tomate también lo son, aunque en
menor grado.
Boro. Es un micronutriente esencial
en el crecimiento de las plantas, pero
tiene un rango muy estrecho entre los
niveles de deficiencia y toxicidad. Altos
niveles de boro inducen una reducción
de la división celular en las raíces, por
lo que se reduce el crecimiento radicu-
lar y la brotación, proceso muy impor-
tante en algunas especies de flores de
120%
100%
proceso de riego y nutrición de plan-
tas. A continuación un resumen de las
características adecuadas para uso
agrícola:
80%
60%
40%
20%
0%
0
1
2
3
4
5
6
7
8
9
10
11
CE dS m -1
Figura 1. Relación entre la CE de la solución de sustrato y la producción de crisantemos (peso
de la planta). C. Sonneveld ([email protected]), y Miguel Urrestarazu, de la Universidad de
Almería13/10/2010
52 Revista Metroflor Edición 94 • www.metroflorcolombia.com