diálogos Digital Julio 2014 | Page 40

Juventud contemporánea: una perspectiva feminista La juventud contemporánea transita en un mundo regido por la interconectividad, es decir los temas de agenda pública dejaron de ser locales para compartirse de un lugar a otro por la red internacional, las relaciones cambiaron con la irrupción de las NTIC y somos calificados como la generación más educada de la historia. Sin embargo quedan marginados en este camino tres desafíos que pretendo compartir: la juventud indígena, los retos de la educación superior y la perspectiva de género como un estilo de vida de las siguientes generaciones. Paradigma será la palabra para compartir acerca de la juventud indígena, una cosmovisión que ve el trabajo de equipo como una forma de construir y al servicio como deber, todo en torno a la comunidad, lo cual da origen a un modelo discrepante del modelo individualista de occidente. Bajo este paradigma de los pueblos indígenas que no sólo coexiste y sobrevive en rincones de América Latina sino también de Europa, África y Asia, existen muchos cuestionamientos. Los primeros que planteo al lector son ¿qué valoración da la juventud al producto de origen indígena? La belleza en el textil indígena es pieza única que lleva “un pedazo del alma en cada una… encierra un cantar único” (Traven, 2002:27) pero no otorga el status de las marcas reconocidas por el mercado; ¿qué actitud asume la juventud ante lo indígena? La defensa de los derechos de las minorías explora una ruta de aceptación en los marcos normativos actuales pero no en el actuar de la juventud que discrimina, que asume que son minoría en lugares como Oaxaca, donde no lo son. Los cuestionamientos sobre violaciones a Derechos Humanos en las comunidades indígenas no se justifican en una cosmovisión distinta, pero se debe coadyuvar a la evolución de una cultura sobre el tema de la dignidad humana en el propio actuar. La perspectiva de género es de los más cuestionados, por considerar que violentan a las mujeres confinadas a tareas del hogar, sin acceso pleno a educación, salud y política de su comunidad, sin embargo considero que esos temas sólo ponen en un plano de vulnerabilidad igualitaria a las mujeres no indígenas, porque son situaciones que también lastiman en un mundo considerado más civilizado. El segundo reto es el de la educación superior, pertinente para discutir no sólo los problemas sino las soluciones. En 1998, UNESCO (visto 15/05/2014: http://www.unesco.org/education/educprog/wche/declaration_spa.htm) había planteado los nuevos retos de una educación superior que ya se había extendido por el mundo. Es decir, la generación de los años treinta del siglo XIX no conoció el acceso pleno de mujeres a la Universidad, la generación de los años sesenta tenía aún otras luchas de un acceso gratuito e igualitario para los jóvenes. 40