(…) el antisemitismo es una forma de discriminación e
intolerancia que se pierde en el amanecer de los tiempos. Como
todo lo que es longevo, el antisemitismo es un odio que se ha
adaptado para no desaparecer. Es como un virus que muta, y ha
encontrado su nicho en cada época de la historia, expandiendo sus
mitos y adaptándose a los contextos imperantes; así, ha sido
religioso, racial y político, y nunca ha desaparecido. (p.39)
La discriminación es causada por la falta de valores en las
personas. Si todos los individuos del mundo tuvieran respeto y
tolerancia como valores primordiales, sería muy probable que no
hubieran ocurrido muchos actos de violencia que han pasado,
como el Holocausto. Sin embargo, en la actualidad existen
muchos conflictos polémicos que se generan por rechazar o dañar
a ciertas personas por sus formas de pensar o por sus creencias.
Es importante mencionar que los valores deben ser inculcados
desde muy temprana edad, en este caso a los niños. De esta
manera, poco a poco aprenderán a respetar los pensamientos y
creencias de otros.
Es así que la discriminación hacia aquellas personas por
solamente tener diferentes pensamientos que otros es un acto de
inmadurez, ya que no se debe rechazar a otros por pensar distinto
y todos deben respetar las ideas e ideologías de cada persona.
Algunas personas creen que todos deben de pensar y actuar igual.
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