DERROTA MUNDIAL - EDICIÓN HOMENAJE AL AUTOR DERROTA MUNDIAL (Edición Homenaje) | Page 598

Salvador Borrego halla casado con judía y que sus hijos se educan como miembros de la comunidad judía- soviética. JUDÍOS EN LAS DOS BARAJAS EN JUEGO Entre los valiosos testimonios que dejó en su Diario James V. Forrestal, Secretario de la Defensa de Estados Unidos en 1947, figura el de haber presenciado cómo los israelitas deslizan ocultos representantes suyos en los dos bandos de cualquier lucha política. Así aseguran infaliblemente un punto de apoyo para sus intereses. Los partidos demócrata y republicano de Estados Unidos son un buen ejemplo. James V. Forrestal refiere que el 4 de septiembre de 1947, siendo Secretario de la Defensa, escuchó decir al Administrador General de Correos, Mr. Hannegan, que "no quería hacer presión pero que una declaración con referencia a la entrada de 150,000 judíos en Palestina tendría una gran influencia y un gran efecto en la recaudación de fondos para el Comité Nacional Demócrata." Forrestal desaprobó esa influencia extraña sobre el Partido Demócrata y trató de ganarse al senador McGrath para rechazarla, pero sus esfuerzos fracasaron y advirtió sorprendido que tal influencia era tan poderosa que todo político rehuía enfrentarla, quizá para no dañar su carrera. (Desde 1880 la influencia judía en el Partido Demócrata era poderosa y se acentuó más a principios del siglo XX, con la intervención del grupo judío de Louis Dembitz Brandéis). Forrestal siguió insistiendo en que era dañina la influencia hebrea en los altos círculos políticos estadounidenses y el 3 de diciembre (1947) discutió el punto con el Secretario de Estado Byrnes y le dijo que era necesario que tanto los demócratas como los republicanos convinieran en no utilizar la cuestión judía como un punto de apoyo. Byrnes se mostró pesimista y le hizo ver a Forrestal que "el rabino Abba Hillel Silver (de Nueva York) era uno de los individuos más allegados a Taft". Sin haber conseguido nada con el senador McGrath, ni con el Secretario de Estado Byrnes, Forrestal se entrevistó el 10 de diciembre con el senador Vandenberg para pedirle que los republicanos dejaran de usar el apoyo israelita "en la política de partido". Vandenberg le contestó que los demócratas lo usaban y que ellos tenían que hacer lo mismo. El partido que prescindiera de ese apoyo —dijo Vandenberg— quedaría en desventaja frente al otro. Tres días más tarde Forrestal habló con el gobernador Dewey, quien también se mostró pesimista respecto a la posibilidad de prescindir de la alianza judía. Dos meses después, en febrero de 1948, Forrestal discutió el asunto con Franklin D. Roosevelt, hijo, quien exaltadamente defendió la intervención israelita. A su vez, Forrestal lo increpó acremente y le dijo que tan sólo estaba procurando que demócratas y 598