Después de investigar el museo, Jack fue a su hotel para crear hipótesis. Él tenía varios sospechosos, pudo haber sido Alexander para cobrar el seguro de ese diamante que equivalía a 50.000 dolares, también pudieron ser David y John, los guardias de seguridad o los dueños de laptop que, según lo que investigó Jack, seguían en Canadá. Creó 3 hipótesis: una que Alexander haya contratado a alguien profesional para que robara el diamante por él; otra que los guardias hayan ido al estacionamiento, David para hackear la seguridad y John para buscar los explosivos; y la última que hayan sido ladrones que están prófugos en alguna parte de Canadá.
Al día siguiente Jack volvió al museo y encontró un pelo, lo llevó al departamento de policía para que analice, después de un rato la policía le dijo que era de David Anderson.
En ese momento Jack ya lo sabía, la coartada de Alexander era perfecta, no pudo haber sido él, en cambio David se contradecía en cada palabra y John también.
Después del juicio David fue condenado a 15 años de prisión y John, a 13. El diamante apareció 2 años después, Jack guardó la información del caso en su archivador y dijo “otro caso exitoso”.