Cuadernos Médicos Sociales 2019; Vol 58 N°4 | Page 178

EDUCACIÓN Respecto a educación, las personas migrantes solicitan especial atención a: (i) problemáticas de acceso al sistema educacional, políticas y progra- mas específicos anti-bullying y anti-discrimina- ción escolar, (ii) desarrollo de intervenciones de sensibilización de la diversidad cultural en cole- gios de manera transversal, (iii) realización de diagnósticos sistemáticos de escolares que con- sideren la variable migratoria de manera formal y estandarizada para identificación y control de brechas de logro de desarrollo infantil, y (iv) la prevención de retiro de niños y jóvenes migrantes en edad escolar, quienes lo hacen para dar inicio a su actividad laboral (48). VULNERABILIDAD SOCIAL Se ha reportado una distribución heterogénea de población migrante internacional vulnerable socioeconómicamente en el territorio continental chileno (49). Migrantes vulnerables en términos socioeconómicos se concentran en comunas de alta vulnerabilidad social general, con “bolsones de concentración” en comunas específicas (50). Los migrantes internacionales se han concentrado en determinadas regiones y comunas a lo largo del tiempo, tales como Arica, Antofagasta, Santiago y Valparaíso. Sin embargo, este patrón se ha acen- tuado en las últimas dos décadas. Si bien los mi- grantes internacionales vulnerables se agrupan en algunas comunas del norte y centro de Chile, estas comunas no siempre son las que reportan los ma- yores rangos de vulnerabilidad para la población general. Hay entonces gran variabilidad en vul- nerabilidad social espacial en población migrante internacional en Chile. No obstante, lo anterior, los migrantes internacionales vulnerables se han concentrado en las comunas que a su vez presen- tan la mayor concentración de inmigrantes a nivel nacional, sobre todo en comunas del norte y de la zona central de Chile. Queda pendiente incorpo- rar una mirada multidimensional de su vulnerabi- lidad socioeconómica, añadiendo variables de en- torno para saber cuál es el impacto que tiene esta distribución espacial en el territorio y cómo los migrantes internacionales interactúan con él (ac- ceso a servicios básicos, como salud, educación, alimentación) (51). ACCESO A LA SALUD Se reportan diferencias en el acceso a servicios Urzúa A., et al. de salud entre población migrante internacional y chilena. Un 8-12% de migrantes (según año de la encuesta CASEN) reporta no tener ningún sis- tema previsional. Al analizar según grupo etario, el grupo de inmigrantes de 0-14 años es el que presenta la mayor proporción de individuos sin previsión de salud (26% versus 1,8% en niños chilenos). Esto es consistente con evidencia in- ternacional que demuestra que niños en todo el mundo accede en menor proporción al sistema de salud que los niños locales (52). Existe mayor proporción de migrantes que reportan no haber accedido a prestaciones de salud habiendo tenido una necesidad (intentó conseguir hora, pero no lo logró). Nuevamente destacan, entre los grupos que no tienen previsión de salud formal, los hom- bres adultos y los menores de edad, lo que podría relacionarse en muchos de estos casos a su mayor fragilidad socioeconómica (53). Respecto del uso de servicios a corto plazo (úl- timos 3 meses), el 24,5% de inmigrantes intentó pedir hora al sistema de salud, pero no la obtuvo (demanda de salud expresada pero no satisfecha). Tanto en chilenos como en inmigrantes, los indi- viduos sin previsión de salud fueron los que pre- sentaron menores tasas de atención médica (59,7 × 100 inmigrantes vs 79 × 100 nacidos en Chile). Acerca de uso de servicios a largo plazo (últimos 12 meses), un 8 13,3% de inmigrantes afirmó es- tar en un tratamiento por alguna condición médi- ca en los últimos 12 meses previos a la encuesta (versus 24,4% en chilenos). Además, inmigrantes sin previsión fueron quienes presentan la menor proporción de cobertura de tratamientos, mien- tras que chilenos con ISAPRE o con otro tipo de previsión los que presentan los menores porcen- tajes de cobertura. El análisis sugiere que en población migrante internacional ser hombre joven, ser niño, y tener bajo nivel socioeconómico se asocian a no tener previsión de salud. Se observan además diferen- cias según país de origen, que se mantienen para diferencias en uso efectivo de servicios de corto y largo plazo (54). En conclusión, la brecha en ac- ceso al sistema de salud en migrantes comparado con nacidos en Chile es real y consistente a lo largo del tiempo de acuerdo con análisis repetido de en- cuesta CASEN, pese a variaciones marginales entre años de análisis. De estos resultados se desprende además la necesidad de mejorar en forma significa- tiva los registros nacionales sobre acceso y uso de servicios por parte de población migrante interna- cional, tanto a nivel primario y secundario, como en el sector de salud público y privado (55).