de mejor manera los impactos de la migración en
la masificación de la actividad física y el desarro-
llo deportivo en Chile. Estos impactos deberían
considerar también la participación destacada en
diversas disciplinas deportivas por parte de niños,
niñas y jóvenes chilenos, hijos de migrantes.
Otro aporte de nuestra investigación es que re-
cogió información acerca de las prácticas de ac-
tividad física de los encuestados antes de migrar
hacia Chile. Por una parte, esto permitió verificar
que los países de donde provienen los inmigran-
tes en Chile tendrían una mayor “cultura depor-
tiva”, la que se manifiesta en que los migrantes
encuestados presentaban, en sus países de ori-
gen, tasas de práctica regular y de participación
en clubes deportivos muy superiores a los de la
población chilena. Por otra parte, al contrastar
estos datos con las prácticas actuales de los mi-
grantes, fue posible establecer algunos hechos
relevantes acerca del impacto de este proceso en
los hábitos de quienes migran. Nuestros resul-
tados muestran que un 64,8% de los migrantes
mantuvieron los hábitos de actividad física y de-
porte (activo-inactivo) que tenían anteriormente.
Esto explicaría por qué la tasa de actividad física
regular de los migrantes en Chile es más alta que
la de los chilenos.
No obstante, los resultados también dan cuenta
de dos grupos donde sí existe una discontinuidad
en los hábitos de los encuestados. Por un lado,
un 28,7% de los encuestados dejó de practicar ac-
tividad física al llegar a Chile. De acuerdo a los
resultados de la encuesta y a los testimonios de
los migrantes entrevistados, el obstáculo funda-
mental es el estilo de vida predominante en las
ciudades chilenas, que se caracteriza por extensas
jornadas de trabajo, poco tiempo de ocio y lar-
gos tiempos de desplazamiento, en especial en la
capital Santiago. Existen además otros problemas
que afectan específicamente a los migrantes, re-
lacionados con su instalación en Chile, como la
realización de trámites administrativos y la bús-
queda de vivienda, empleo, educación para sus
hijos y otros. Estos problemas se presentan sobre
todo durante sus primeros meses en Chile, que
es justamente el período decisivo para continuar
o interrumpir la práctica de deportes o actividad
física. De acuerdo con las entrevistas realizadas,
estos problemas afectarían en particular a quie-
nes tienen empleos precarios, bajos ingresos y/o
viven en sectores periféricos o marginales de las
ciudades. Corresponde por tanto a un tipo de
asimilación “hacia abajo”, “segmentada” como
proponen Portes y Zhou (17), esto es, cuando
Feller C., et al.
inmigrantes en condiciones socioeconómicas si-
milares a las clases desposeídas se tienden a asimi-
lar a estos últimos. En este sentido, sería relevante
abordar los efectos negativos de esta asimilación
en los propios inmigrantes desde una perspecti-
va de salud, por cuanto los hábitos de actividad
física pueden ser determinantes en la prevalencia
o pérdida del efecto de “migrante sano”, Para el
caso chileno, este efecto ha sido estudiado por
Cabieses, Tunstall y Pickett (18), quienes constata-
ron que en general la población migrante en Chile
tiene mejores índices de salud que los nacionales.
Sin embargo, este efecto es influido negativamen-
te en Chile, en mayor medida que en otros países,
por la condición socioeconómica de los migran-
tes, y positivamente, al igual que en otros países,
por el tiempo de residencia en el país..
A la inversa, un 6,2% de los encuestados co-
menzó a practicar actividad física en Chile. Parte
importante de ellos corresponde a personas que
se transportan caminando o en bicicleta (“trans-
porte activo”). Se trata de una modalidad mucho
más frecuente en personas (mayoritariamente
mujeres) y comunidades de mayor vulnerabilidad
social o menor nivel socioeconómico, en especial
haitianos y bolivianos. En muchos casos, se trata
de personas que se ven obligadas a caminar o an-
dan en bicicleta, debido al sistema segregado de
movilidad que predomina en las ciudades chile-
nas, y/o a las condiciones de los trabajos a la que
acceden estos migrantes. Por ende, no es posible
asegurar que su uso contribuya efectivamente al
bienestar de los migrantes.
Estos dos fenómenos, opuestos aunque interre-
lacionados, evidencian el impacto negativo que la
migración hacia Chile puede tener en la calidad de
vida de los migrantes, incluyendo la adquisición
permanente de un estilo de vida inactivo o seden-
tario. Al respecto, podría ser de interés la realiza-
ción de estudios cualitativos para profundizar en
la vivencia subjetiva del proceso migratorio hacia
Chile y su impacto en los hábitos de actividad físi-
ca de los migrantes.
Un último aporte de nuestra investigación dice
relación con la elaboración de algunas recomen-
daciones para la implementación de políticas pú-
blicas que estimulen la participación e integración
de los migrantes a través del deporte y la actividad
física. Al respecto, el primer desafío sería promo-
ver activamente la inclusión de los migrantes en
todas las políticas, planes y programas deportivos
que se ejecutan desde el sector público, tanto de
nivel nacional como local. Ello supone eliminar
las barreras idiomáticas y administrativas que