CRÍMENES POLACOS CONTRA LOS ALEMANES ÉTNICOS EN POLONIA CRÍMENES POLACOS CONTRA LOS ALEMANES ÉTNICOS | Page 106

50. "¡Denles!" ¡Denles!". Asesinatos de Grieger y John en Posen; resultado: 4 cadáveres de hombres, sepultados. Extraído de las catas de la Central de la Policía Criminal del Reich. - Comisión Especial Posen - Distintivo: Tgb. V (RKPA) 1486/4. 39. El 24 de septiembre de 1939, fueron encontrados, en una parte fácilmente accesible del cementerio Matthaei de Posen, a 85cm. de profundidad, cuatro cadáveres de hombres, sepultados. Una inspección superficial, hecha por el médico forense, demuestra que se trataba de asesinatos. La autopsia procedió en los días 25 y 26-9-39, dio un resultado que ni se recibió después de la primera inspección. En el cadáver P. 1 (Grieger) se verificaron graves fracturas del occipucio, producidas por un golpe dado con instrumento embotado; en el rostro tenía innumerables heridas perforantes; el ojo izquierdo estaba perforado. Se constató una lesión producida por un proyectil que atravesó el tórax, herida que, por sí sola, no fue mortal. La muerte debe ser atribuida a la coincidencia de varias lesiones. En la cadera izquierda se encontró una bala clavada. En el cadáver P. 2 (John) se encontró una bala clavada en el cráneo, y varias heridas penetrantes. En el rostro tenía varias heridas, hallándose el cutis agrietado. A vista del grave aplastamiento de la mandíbula superior, el medico concluye, por la característica de las fracturas, los dientes se arrancaron aproposito 1 . En la noche del 3 de septiembre de 1939, se paró, frente a la casa N° 3 de la calle Markgrafenring en Posen, unos diez camiones militares polacos, ocupados por tiradores y scouts, aglomerando entonces gran multitud en la calle. El comandante del servicio de protección contra ataques aéreos de este distrito, el polaco forajido Stefen Nowicki, mandó al alemán Gerhard Grieger, de 32 años de edad, que en su calidad de portero de aquella casa era responsable de las medidas de precaución contra ataque aéreo, el techo de la casa porque, según dijo, había alguien allá arriba. Grieger fue a buscar en vano. Esta trampa de increíble vileza se hizo fatal para Grieger, pues en la calle empezaron a gritar que, en el techo, alguien estaba dando señales luminosas. 1 Los dos cadáveres se identificaron los otros dos cuerpos como Max Otto 48 años de edad, y Erich Manthe, de 21 años, que fueron asesinados en otro lugar, por policías polacos.