CRÍMENES POLACOS CONTRA ALEMANES ÉTNICOS EN POLONIA-EDICIÓN MEJORADA ATROCIDADES POLACAS CONTRA ALEMANES ÉTNICOS | Page 177
Recibió, en esa ocasión, tres tiros un tal Franke de Deutschfeld, cerca de
Schokken; él se estiró y murió. Pasando cerca de él, cerré los ojos. En ese tiempo,
venían acercándose, de nuestro grupo, soldados que nos parecían alemanes.
Eran dos, primero; después, doce. Cuando percibimos que eran, de hecho,
alemanes, corremos a su encuentro mientras la metralleta polaca todavía nos
perseguía. Cuando una ametralladora alemana dirigió el fuego sobre la polaca,
ésta cesó el fuego. Después de liberado nuestro grupo, vi en Lowitsch, juntar a
muchos internados, que fueron embarcados en automóviles.
El grupo de Rogasen la pasó mucho peor que nosotros. ¿Quién podría dar
informaciones precisas al respecto y el barbero Seehagel, de Rogasen, que
actualmente se encuentra en Bukowitz, a ocho kilómetros de Wongrowitz? Este
grupo fue ametrallado por militares polacos cuando se acercaban los tanques
alemanes. Yo mismo comprobé que el referido barbero fue herido en el hombro.
Podrían dar información sobre ese grupo, el comerciante Thonne, igualmente, el
propietario de la fábrica Schulz, de Rogasen, ambos todavía residentes en
Rogasen.
Finalizado, deseo observar que todos habíamos llegado a un punto tal de
depresión psicologica que estábamos dispuestos al suicidio. Calcular que unos 20
a 25 por ciento de los internados perdieron, temporalmente, el juicio, volviendo,
sin embargo, muchos a recuperarlo, después de la liberación por las tropas
alemanas. Vi al antiguo senador Dr. Busse, completamente abatido, en el hospital
de Lodsch, donde aún se encuentra. En el hospital de Lowitsch estaba la mujer
de un administrador de la región de Argenau, completamente loca; oírle gritar y
gritar; si todavía vive, no lo sé.
Dictado en alta voz, aprobado y firmado
Ass. Wilhelm Romann
Fuente: W R II
89. Ancianos sufriendo los martirios de la deportación.
Relato del veterinario Dr. Schulz, de Lissa.
El testigo, el Dr. Schulz, veterinario en Lissa, depuso bajo juramento:
En la tarde del 1 de septiembre, los 350 a 400 alemanes presos fueron conducidos
a Storchnest, bajo el mando de un suboficial del ejército polaco. Se encontraba
entre nosotros el profesor Bonin, de 82 años de edad, vestido sólo de bermuda y