Crimen y Castigo - Fiódor Dostoyewski
-Escucha -dijo en tono resuelto-: el diablo os lleve a todos, y no
quiero saber nada de vosotros, pues no entiendo absolutamente
nada de vuestra conducta. No creas que he venido a interrogarte,
pues no tengo el menor interés en averiguar nada. Si te tirase de
la lengua, empezarías, a lo mejor, a contarme todos tus secretos,
y yo no querría escucharlos: escupiría y me marcharía. He venido
para aclarar, por mí mismo y definitivamente, si en verdad estás
loco. Pues has de saber que algunos creen que lo estás. Y te
confieso que me siento inclinado a compartir esta opinión, dado tu
modo de obrar estúpido, bastante villano y perfectamente
inexplicable, así como tu reciente conducta con tu madre y con tu
hermana. ¿Qué hombre lo haría, Tu madre está muy enferma
desde ayer. Quería verte, y aunque e que no sea un monstruo, un
canalla o un loco se habría portado con ellas como te has portado
tú? En consecuencia, tú estás loco.
-¿Cuándo las has visto?
-Hace un rato. ¿Y tú? ¿Desde cuándo no las has visto? Dime, te
lo ruego: ¿dónde has pasado el día? He estado tres veces aquí y
no he conseguido verte. tu hermana ha hecho todo lo posible por
retenerla, ella no ha querido escucharla. Ha dicho que si estabas
enfermo, si perdías la razón, sólo tu madre podía venir en tu
ayuda. Por lo tanto, nos hemos venido hacia aquí los tres, pues,
como comprenderás, no podíamos dejarla venir sola, y por el
camino no hemos cesado de tratar de calmarla. Cuando hemos
llegado aquí, tú no estabas. Mira, aquí se ha sentado, y sentada
ha estado diez minutos, mientras nosotros permanecíamos de pie
ante ella. Al fin se ha levantado y ha dicho: « Si sale, no puede
estar enfermo. La razón es que me ha olvidado. No me parece
bien que una madre vaya a buscar a su hijo para mendigar sus
caricias.» Cuando ha vuelto a su casa, ha tenido que acostarse.
Ahora tiene fiebre. «Para su amiga sí que tiene tiempo», ha dicho.
Se refería a Sonia Simonovna, de la que supone que es tu
prometida o tu amante. No sabe si es una cosa a otra, y como yo
StudioCreativo ¡Puro Arte!
Página 538