Crimen y Castigo - Fiódor Dostoyewski
nosotros poetas y capitalistas. ¿Ha observado usted que aquí, en
Rusia, abundan los fulleros entre las personas de buen tono? Yo
vivo ahora en el campo, pero estuve encarcelado por deudas. El
acreedor era un griego de Nejin. Entonces conocí a Marfa
Petrovna. Entró en tratos con mi acreedor, regateó, me liberó de
mi deuda mediante la entrega de treinta mil rublos (yo sólo debía
setenta mil), nos unimos en legítimo matrimonio y se me llevó al
punto a sus propiedades, donde me guardó como un tesoro. Ella
tenía cinco años más que yo y me adoraba. En siete años, yo no
me moví de allí. Por cierto, que Marfa Petrovna conservó toda su
vida el cheque que yo había firmado al griego con nombre falso,
de modo que si yo hubiera intentado sacudirme el yugo, ella me
habría hecho enchiquerar. Si, no le quepa duda de que lo habría
hecho. Las mujeres tienen estas contradicciones.
-De no existir ese pagaré, ¿la habría plantado usted?
-No sé qué decirle. Desde luego, ese documento no me
preocupaba lo más mínimo. Yo no sentía deseos de ir a ninguna
parte, y la misma Marfa Petrovna, viendo cómo me aburría, me
propuso en dos ocasiones que hiciera un viaje al extranjero. Pero
yo habia ya salido anteriormente de Rusia y el viaje me había
disgustado profundamente. Uno contempla un amanecer aquí o
allá, o la bahía de Nápoles, o el mar, y se siente dominado por
una profunda tristeza. Y lo peor es que uno experimenta una
verdadera nostalgia. No, se está mejor en casa. Aquí, al menos,
podemos acusar a los demás de todos los males y justificarnos a
nuestros propios ojos. Tal vez me vaya al Polo Norte con una
expedición, pues j'ai le vin mauvais y no quiero beber. Pero es
que no puedo hacer ninguna otra cosa. Ya lo he intentado, pero
nada. ¿Ha oído usted decir que Berg va a intentar el domingo una
ascensión en globo en el parque Iusupof y que admite pasajeros?
-¿Pretende usted subir al globo?
-¿Yo? No, no... Lo he dicho por decir -murmuró Svidrigailof,
pensativo.
StudioCreativo ¡Puro Arte!
Página 349
Comentario [L39]: Tengo el vino malo