CRIMEN Y CASTIGO - FIÓDOR DOSTOYEVSKI | Page 296

Crimen y Castigo - Fiódor Dostoyewski Pulqueria Alejandrovna siguió hablando con su acostumbrada volubilidad. -Hemos hecho bien en marcharnos. Rodia tenía que acudir urgentemente a una cita de negocios. Le hará bien dar un paseo, respirar el aire libre. En su habitación hay una atmósfera asfixiante. Pero ¿es posible encontrar aire respirable en esta ciudad? Las calles son como habitaciones sin ventana. ¡Qué ciudad, Dios mío! ¡Cuidado no te atropellen...! Mira, transportan un piano... Aqu