Congresos y Jornadas Didáctica de las lenguas y las literaturas. | Page 94

conocimiento y dominio de la lengua que los hablantes adquieran y desarrollen. Asegurar esta capacidad a los futuros docentes es tarea del área de lengua. Esto implica la enseñanza articulada de cuestiones teóricas y procedimentales para asegurar la comprensión de los textos y para guiar la elaboración de textos con un grado de complejidad acorde al nivel educativo que los estudiantes transiten. Este enfoque es el que nos permite hablar de didáctica de la lengua y no únicamente de enseñanza de una lengua y de su gramática. La propuesta objeto de esta comunicación se basa en lo que Bronckart (1997/2004) denomina "arquitectura textual". La actividad de escritura requiere de la planificación de los textos. Al respecto Bronckart desarrolló la metáfora del “hojaldre textual” para ilustrar los niveles de organización de los textos, planos que se superponen al momento de elaborar los textos orales o escritos. Es decir, decisiones simultáneas que los hablantes vamos tomando y que el autor sistematizó del siguiente modo: • Nivel de la infraestructura del texto o plan general del texto. Los hablantes contamos con herramientas lingüísticas y no lingüísticas que nos permiten dar forma al contenido de nuestros textos. En función de la finalidad que pretendamos con nuestros textos, decidiremos qué decir, la forma en que organizaremos los contenidos seleccionados y que palabras utilizaremos. • Nivel de los mecanismos de textualización. Se trata de la creación de encadenamientos lógicos y temporales con los que se dota de cohesión a los textos. Se logra mediante el empleo de elementos lingüísticos que permiten avanzar en la progresión temática: la introducción de unidades de información nueva en el desarrollo del texto o la recuperación de esas mismas unidades en segmentos posteriores, el establecimiento de relaciones de subordinación o coordinación entre las estructuras proposicionales de los textos, etc. • Nivel de los mecanismos de apropiación enunciativa. Son procedimientos lingüísticos para dotar al texto de coherencia interactiva. Es preciso decidir si se va a contar o exponer y desde qué voz hacerlo. En este nivel, los hablantes contamos con elementos lingüísticos para crear diferentes voces en un texto. Es tarea del docente de lengua, seleccionar y enseñar los contenidos fundamentales para que los estudiantes puedan construir textos coherentes, evitando que la planificación de los textos quede a expensas de su buen hacer, sin conciencia de las decisiones que tomaron. 859