Congresos y Jornadas Didáctica de las lenguas y las literaturas. | Page 502
do, la diferencia entre los lectores que comprenden más y aquellos que comprenden menos
puede disminuir utilizando el Traductor de Google (Riess y Vanmacher, 2015). Es decir
que la incorporación de esta herramienta permite desarrollar habilidades que, integradas a
las estrategias más utilizadas (predicción, skimming, scanning, inferencia, etc.), promue-
ven y aumentan la lectocomprensión de los estudiantes con diferentes niveles de dominio
de inglés.
Dado que los TA son un recurso cada vez más utilizado por los estudiantes, es con-
veniente que los docentes actúen como mediadores y los orienten para que sepan qué pue-
den esperar de un traductor automático. Se les debe transmitir que si se emplea adecuada-
mente puede resultar útil, por ejemplo, si uno desea comprender con rapidez y sin dema-
siadas pretensiones un texto escrito en una lengua desconocida. Y, a la vez, es importante
mostrarles que el texto traducido puede contener distintos tipos de errores, por ejemplo,
cuando un TA se enfrenta a una palabra polisémica, el equivalente elegido puede no ser el
correcto.
Al emplear herramientas de TA es importante tener en cuenta sus ventajas para obte-
ner el máximo provecho de ellas, pero también estar atentos a sus limitaciones y dispues-
tos a hacer un trabajo de post-edición para eliminar los errores que se puedan haber produ-
cido en el proceso de traducción.
Los resultados han demostrado que, con el entrenamiento adecuado, los estudiantes
pueden aprender a utilizar el Traductor de Google como herramienta de apoyo para mejo-
rar sus habilidades de lectocomprensión.
De ahí la importancia de diseñar propuestas de enseñanza innovadoras que favorez-
can la aplicación de las TIC ya no meramente para sustituir recursos no tecnológicos ni
para aumentar la eficacia de las herramientas, sino para transformar las tareas ya sea por
medio de una modificación significativa o de la creación de actividades antes inconcebi-
bles. Esta transformación implica que los estudiantes pasen de aprender “de” a aprender
“con” las computadoras (Reeves, 1998) logrando cada vez más protagonismo como cons-
tructores de sus propios procesos de aprendizaje.
Bibliografía
Alarcón Navío, E. (2003). «Traducción automática versus traducción humana: tipología de
errores», en Muñoz Martín, Ricardo [ed.] I AIETI. Actas del I Congreso Internacional de la
Asociación Ibérica de Estudios de Traducción e Interpretación. Granada 12-14 de febrero
de 2003. Granada: AIETI. Vol. n.º 2, pp. 721-738. ISBN 84-933360-0-9. Recuperado de
http://www.aieti.eu/pubs/actas/I/AIETI_1_EAN_Traduccion.pdf
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