Congresos y Jornadas Didáctica de las lenguas y las literaturas. | Page 442

ticipantes. Estos Talleres cambiaron nuestra visión de la actividad docente, aquí nos en- contramos con una nueva herramienta de aprendizaje donde los miedos e inseguridades se desvanecieron de la mano del trabajo en equipo; aquí se logró la sensación de que se abrían muchas puertas al descubrimiento, a la resignficación y que el trabajo no era sólo de las coordinadoras, sino una labor en conjunto con todos los participantes. Agradecemos a Osvaldo Miranda, por poner a disposición la Biblioteca Popular Ciudad de los Naranjos y, por supuesto, a la Cátedra, por darnos la libertad en cada encuentro de ex- plorar nuestros conocimientos, nuestras habilidades, y ponerlas en práctica, con la certeza de dejar atrás de a poco nuestras inseguridades y avanzar en este puente al mundo de las Letras, sobre todo en la capacidad de escuchar al otro y construir juntos el aprendizaje des- de diferentes perspectivas. Una fiesta en la Biblioteca A modo de conclusión, retomamos la experiencia del Taller de la Marcelino porque tiene más años de duración, pero esto no significa que el Taller de las alumnas no haya generado lo que en este apartado hemos de exponer 32 . Coordinadoras especialistas en Letras y participantes ávidos de lecturas reunidos en una Biblioteca, espacio-puente de intereses, de experiencias, de saberes, de cultura en fin que van uniendo los libros-puentes que nos convocan. Tres horas por mes, sólo eso implican nuestros encuentros. Ocho o nueve meses en el año. Operaciones matemáticas de por me- dio… no más de 30 horas compartidas. Pero las matemáticas, decía Rodolfo Kush, no se entienden con las humanidades, y las 30 horas se multiplican al infinito en las horas de lectura solitaria, de meditación y de investigación, las horas dedicadas a indagar en la obra y de indagarse antes y después de cada encuentro. En palabras de ellas: Confieso que soy una lectora compulsiva, por lo que muchos libros del taller ya los había leído, pero para mí es muy importante escuchar las opiniones de las profesoras y de mis compañeras (…) Es increíble cómo, a pesar de leer todos el mismo libro, se producen tantas miradas diferentes… (Graciela Nieto Ortíz). Para mí es extraordinaria la posibilidad que ofrece el Taller de compartir lo leído. Enriquecerse con el otro. Mirar un mismo libro con tantos ojos diferentes… y por Esto se podrá confirmar con el paso del tiempo, cuando más cohortes de alumnos hayan pasado por esta experiencia. 32 1207