Congresos y Jornadas Didáctica de las lenguas y las literaturas. | Page 278

como “ambiguo”. Como ejemplo de comentarios ambiguos se puede citar el siguiente: “Not clear why?” (“No es claro por qué?”). En este ejemplo no se comprende si el docente afirmaba que no era claro por qué el alumno dijo lo que dijo y lo enfatizó con el signo de pregunta para expresar duda, o si de hecho le estaba preguntando al alumno si no estaba claro por qué escribió lo que escribió. Tabla 4. Tipos de Propósito. Corregidas Corregidas Co- rrectamente Corregidas Inco- rrectamente No Corregidas No Se Observa Tipos de Propósitos Cantidad % Cantidad % Cantidad % Cantidad % Cantidad % Cantidad % LENGUA 65 22,03 39 60,00 33 84,62 6 15,38 4 6,15 22 33,85 IDEAS 203 68,81 134 66,01 107 79,85 27 20,15 24 11,82 45 22,17 AMBIGUO 27 9,15 14 51,85 13 92,86 1 7,14 3 11,11 10 37,04 Total: 295 % 187 153 34 31 77 63,38% 81,81% 18,18% 10,50% 26,10% La amplia mayoría de las preguntas (68,81%) apuntaban a que el alumno resolviera cues- tiones de desarrollo, clarificación o ampliación de ideas y sólo un 22,03% se referían a problemas lingüísticos, contrario a lo observado por Ferris et al. (2011). Hubo una propor- ción significativamente mayor de intentos de corrección (60%) que de no corrección (6,15%). El mayor índice de correcciones se dio entre las preguntas que apuntaban a las ideas (66,01%), dentro del cual se observó un 79,85% de efectividad. Sin embargo la ma- yor efectividad se reflejó paradójicamente entre las preguntas identificadas como ambi- guas (92,86%), seguidas de las de lengua (84,62%). Pregunta Investigativa 4: ¿Cuál es la percepción de los docentes sobre su propia práctica de devolución escrita, en especial sobre el uso de preguntas? La encuesta realizada con dos de los docentes de la cátedra, a quienes se denomina aquí por los seudónimos Juan y María, arrojó resultados interesantes con respecto a sus prácti- cas de devolución escrita. Ambos consideran que la devolución indirecta es más apropiada que la directa y que el uso de preguntas es útil para puntualizarles un error a los alumnos, en línea con lo observado por Amrhein y Nassaji (2010). El profesor Juan prefiere el tipo de devolución indirecta puesto que además de ser orientadora, asume que el alumno debe- ría poder ver el error y corregirlo sin que se le provea la respuesta correcta. Esto indica la postura del docente frente a los conocimientos previos del alumno. Para Juan, su rol como docente es el de guiar al alumno en su aprendizaje, haciendo notar errores que debería po- 1043