Congresos y Jornadas Didáctica de las lenguas y las literaturas. | Page 689

se vincula al nuevo y heterogéneo escenario tecnológico que configura las escuelas de nuestro país como producto tanto de las políticas educativas de dotación de dispositivos tecnológicos como de las nuevas tecnologías que han ingresado a las escuelas en los úl- timos años sin la mediación de esas políticas (Dussel, 2011). Tal como lo entendemos, este nuevo escenario representa un desafío pedagógi- co en dos sentidos estrechamente imbricados (Tedesco, 2012). Primero, tal como seña- lan de forma relativamente consensuada los diferentes estudios locales del campo de la TE, la incorporación de nuevas tecnologías en el contexto escolar no se traduce directa- mente en una mejora en los procesos de enseñanza y aprendizaje que allí se desarrollan. Segundo, la transformación cualitativa que supone el nuevo escenario tecnológico para la escuela demanda revisar y repensar los marcos interpretativos sobre la enseñanza (Burbules & Callister, 2001; Dussel, 2011; Buckingham, 2012; Maggio, 2012) y cons- truir conocimientos dedicados a comprender lo modos en que las nuevas tecnologías atraviesan los procesos que se desarrollan en el ámbito escolar. El segundo problema que nos convoca ha sido conceptualizado por el campo de la Didáctica especial de la Lengua y la Literatura -más específicamente, por la línea de estudios socioculturales e históricos que se desarrollan en el marco de esta área (Bombini & Cuesta, 2006)- y aborda las problemáticas que han conllevado a lo largo de la historia reciente los procesos de innovación destinados a generar transformaciones y mejoras en la disciplina escolar en cuestión. En este sentido, diversos trabajos dedicados a analizar los avatares de la enseñanza de la Lengua y la Literatura han sabido dar cuen- ta de las dificultades y vacíos metodológicos que los sucesivos aplicacionismos desarro- llados en el marco de reformas curriculares y pensados en términos de actualización de contenidos han traído para las prácticas de enseñanza que se desarrollan en las clases de Lengua y Literatura. Si entendemos a las TIC como formas culturales, atravesadas por configuracio- nes simbólicas, que, a su vez, encuentran injerencia en términos propositivos y a través de diferentes enunciaciones en diseños curriculares, trayectos de formación, materiales didácticos, etc., se torna visible la necesidad de comprender el nuevo escenario que con- forman como parte del entramado de reflexiones sobre la Didáctica de la Lengua y la Literatura. A su vez, comprender el sentido que se les asigna a las TIC como parte de la enseñanza de esta disciplina resulta fundamental para trazar puentes y un diálogo que permita no caer en aplicacionismos que hagan que la inclusión tecnológica gire en el va- 689