Congresos y Jornadas Didáctica de las lenguas y las literaturas. | Page 43

solo se busca el dato, sino llegar a descubrir la razón por la que se dio determinada situación, información que únicamente el docente posee. Respecto de lo inatendido (Dejours, 2009), se pone de relieve al contrastar la filmación y la planificación de la clase, y solo el docente podrá explicar por qué se produjo. Por lo aportado en situación (Bronckart, 2001), nos referimos a aspectos y contenidos que conformaron la clase, sin haber sido incluidos en la planificación. Es decir, que por diversos motivos fueron desarrollados y enseñados en la clase. Con el análisis de estos aspectos, buscamos desentrañar los porqués de tales situaciones, qué circunstancias las motivaron. Se trata de abordar aspectos, imposible de planificar, que escapan a la planificación, que hacen a la actividad y contribuyen a la riqueza de la interacción humana. Consideramos que constituyen el conocimiento acerca del Trabajo efectivo de una situación o actividad de enseñanza concreta para situar a los agentes (trabajador e investigador) en el marco del trabajo real. Por tanto, las instancias de reflexión y explicación que se promueven, son la esencia de esta metodología, por ser lo que permite al trabajador vislumbrar el trabajo real, la multiplicidad de otras posibilidades para futuras sesiones de trabajo. Mediante la entrevista, se promueve la charla del trabajador acerca de lo realizado. Se pone al trabajador en contacto con los datos concretos de su hacer que, en el caso de la filmación, incluso puede ver. De la comprobación por parte del docente de lo que hizo en la clase, debe surgir la conciencia de lo abandonado, o de lo inatendido o de lo aportado en situación, y el sentido de todo ello. Y debe surgir, además, la evidencia de que otras posibilidades de acción son posibles y necesarias para futuras sesiones. En este análisis y construcción de sentido que se espera que el trabajador realice, una categoría importante es lo anticipado (Clot, 2005) : los resultados que el trabajador esperaba alcanzar (estrechamente relacionado con lo planificado), que al ver lo filmado o leer el registro de su clase, comprueba si los logró o no. Este proceso que Bronckart (et al., 2004) categoriza como Trabajo evaluado o interpretado es el que le permite proyectar a futuro, producir y movilidad nuevos recursos, de ahí lo dialógico de la actividad. Lo real del trabajo no se agota nunca y en ello está la clave del desarrollo. Siempre se puede ir más allá. Relación entre trabajo efectivo y trabajo real 43