Congresos y Jornadas Didáctica de las lenguas y las literaturas. | Page 366

"marcador discursivo" se presenta como el más adecuado para denominar a estas unidades, pues abarca las diversas funciones que son capaces de desempeñar. En efecto, los marcadores no sólo enlazan y conectan los diferentes sintagmas de un texto, sino que también son los encargados de relacionar las intenciones y supuestos que se esconden tras los enunciados de un discurso. Como se mencionó anteriormente la mayoría de los lingüistas que se han ocupado del tema (Portolés: 2001) coinciden en indicar, como ya se mencionó con anterioridad, que los marcadores discursivos señalan una relación entre la interpretación de la porción informativa en la que aparecen y la porción anterior. No necesariamente deben aparecer al inicio del segmento, aunque por lo general lo introducen. Es decir, para comprender la naturaleza de estos marcadores discursivos reside en su carácter de marcas de sentido de procesamiento, no conceptual (Portolés: 2001). De acuerdo con esta perspectiva, los marcadores discursivos actúan como señales de cómo debe procesarse una porción informativa en relación con el resto del texto y el contexto, pero carecen del significado léxico que poseen otras unidades. En otras palabras, los conectores guían la realización de inferencias cuando se procesa un texto. Las tipologías que tomamos como base son las propuestas por Martín Zorraquino y Portolés (1999: 4081-4082) denominados marcadores discursivos y se centra en las funciones discursivas que cumplen estas unidades. Y la propuesta por Calsamiglia y Tusón, quien los denomina conectores textuales (1999:248), conectores metatextuales (1999: 246 y 247) y conectores que introducen operaciones discursivas (1999: 247). Calsamiglia y Tusón (1999) sostienen que el sistema de la lengua pone a disposición de los hablantes unas piezas lingüísticas que relacionan de forma explícita segmentos textuales, estableciendo entre de los diversos tipos de relaciones semánticas: se trata de los llamados marcadores discursivos y los conectores. Cuando la relación entre enunciados se expresa a través de un conector, este manifiesta lazos preexistentes que se expresan a través de un elemento sintáctico-semántico para indicar de la forma más precisa y clara la relación que se intenta comunicar. Ahora bien, en cuanto a los géneros discursivos seguimos a Bajtín (1998), quien los define como aquellos enunciados que son elaborados en las distintas esferas de uso de la lengua y de la praxis humana. Estos pueden ser orales y escritos, además se los puede clasificar en primarios (simples) aquellos que pierden una relación inmediata con la realidad y con los enunciados reales de los otros, y se caracterizan por formar parte de los complejos; en tanto los secundarios (complejos) se originan en condiciones de forma escrita. Es decir, 366