Congresos y Jornadas Didáctica de las Lenguas y las Literaturas - 2 | Page 1006

Como podemos observar, tanto en los ejemplos 6) y 7) el autor materializa su punto de vista, por ejemplo (en el caso 7) con el uso de adjetivos calificativos. Según García Negroni (2010) “[…] cuando el adjetivo aparece pospuesto, su valor es descriptivo: la cualidad que se predica es presentada como una propiedad objetiva y real del sustantivo. Cuando aparece antepuesto, adquiere, en cambio, un carácter evaluativo: el adjetivo no predica una propiedad independiente del referente, sino que introduce algún tipo de valoración subjetiva del hablante”. En este caso la utilización por parte del enunciador del adjetivo calificativo “buena” antepuesto al sustantivo “antología”, adquiere un carácter evaluativo. También destacamos la presencia de la forma perifrástica o analítica: muy + adjetivo en grado positivo (García Negroni, 2010). En nuestro caso, la forma “muy” intensifica al adjetivo en grado positivo “útil. El caso 6) además de poner de manifiesto valoraciones del autor a través de la utilización del participio “desnortadas” para calificar a las “posturas” y de los infinitivos “vapulear” y “desacreditar” que imprimen al enunciado una connotación negativa, explicitan la discusión del autor con otro crítico, del que toma distancia. Ambos ejemplos permiten dar cuenta de que en este manual, la interlocución entre sujeto-autor y sujeto-lector es doble. El lugar del saber se construye de manera diferente en el texto que en las notas al pie. Por un lado, en el texto, se pone de manifiesto la representación de un destinatario que “debe” aceptar “el saber” (“lo que no debe hacerse”, “le tiene sobre todo que interesar”). Contrariamente, las notas al pie presentan como destinatario un sujeto con acceso 992 Investigación y Práctica en Didáctica de las Lenguas