Congresos y Jornadas Didáctica de las Lenguas y las Literaturas - 1 | Page 1190

y escritos coherentes y cohesivos, con al menos una estructura mínima consistente en una tesis y un argumento, como así también, en el caso de textos escritos, de efectuar durante el proceso de producción reflexiones metacognitivas y metalingüísticas de distinta índole que favorezcan el logro de textualizaciones más eficaces. Esa competencia resultaría enriquecida con una adecuada secuencia de actividades de enseñanza-aprendizaje. Si bien la mayoría de los docentes considera que la comprensión y producción de discursos argumentativos constituye un contenido propio del nivel medio, pretendemos aportar evidencia empírica que demuestre que la educación primaria es un ámbito propicio para su aprendizaje-enseñanza. Por ello, en una primera fase de la investigación realizaremos un diagnóstico de la competencia para argumentar que poseen niños de entre 11 y 12 años, Y luego en la fase experimental del proyecto, aplicaremos una secuencia didáctica que apunta a la construcción de estrategias para que los niños perfeccionen sus habilidades argumentativas con la adecuada interacción con sus pares y docentes, en contextos significativos de la comunidad de pertenencia. Encuadre teórico Nuestras investigaciones están basadas en una concepción de alumno como un sujeto activo constructor de nuevos conocimientos a partir de los que ya posee y que desarrolla competencias a partir de la interacción con sus pares y con el docente. La figura del docente se configura como un mediador activo que realiza propuestas. En los procesos de lectura y escritura, el rol del lenguaje, el diálogo y la intervención de un adulto o par más capacitado es decisiva para el aprendizaje (Vygotsky, 1988, 1992; Rogoff y Lave, 1984; entre 1174 Investigación y Práctica en Didáctica de las Lenguas