Figura 1. Estudiantes de la primera Cohorte de la Maestría en Recursos Energéticos de la Universidad de Santander, quienes en su primer día de clases presentaron diagnóstico de escritura. Fuente: propia.
Lo anterior se visibiliza ya que al inicio de su especialización o maestría se aplica un diagnóstico de escritura bajo los mismos parámetros de las Pruebas Saber Pro y, en el cual se identifica que sus resultados son similares a los obtenidos por alumnos de primer semestre de pregrado, quienes también presentan esta prueba en la asignatura de Competencias Comunicativas liderada por la Unidad de Éxito Estudiantil de la UDES.
A partir de la revisión de dichas pruebas se reconocen falencias centradas, principalmente, en la falta de una estructura básica de texto, errores gramaticales y ortográficos, ausencia de una intención comunicativa e ideas desarticuladas que no tienen una dirección clara, pues no se define un público lector.
“Se reconocen falencias en la falta de una estructura básica de texto, errores gramaticales y ortográficos, ausencia de una intención comunicativa e ideas desarticuladas"