U na nueva batalla tecnológica está a punto de arrancar con el mundial 2015 de Fórmula 1, y os intentaremos acercar las claves que pueden marcar quién ha hecho mejor su trabajo durante esta larga pretemporada para los aficionados
Existen una serie de claves que son intrínsecas a la Propia Fórmula 1, y que son una constante año tras año, y otras que se originaron a raíz del último gran cambio reglamentario introducido la temporada pasada. Aunque hay muchas más claves, a veces igual de importantes, éstas son las siete que no debemos pasar por alto..
2. Capacidad de evolucion
En realidad, podría estar incluido en el punto anterior, pero soy partidario de diferenciarlo siempre por un simple motivo: hay equipos que son capaces de hacer un buen coche de partida, con el que logran buenos resultados en las primeras carreras, pero con el paso de los Grandes Premios van quedándose rezagados al no poder mantener el mismo ritmo de evolución que otros equipos.
Diseñar una buena base inicial es importante, pero también es fundamental ser capaz de llevar un ritmo de evolución ágil durante toda la temporada. Como prototipos que son, los monoplazas de Fórmula 1 están en constante evolución, y deben asignarse los recursos teniendo eso siempre en cuenta. Una temporada de Fórmula 1 es muy larga tecnológicamente, y hay que estar siempre preparado en la batalla de la evolución.
3.simulador
La importancia del simulador ha tomado una especial relevancia desde que se prohibieron los tests ilimitados en pista. Ahora los equipos sólo pueden rodar con sus monoplazas en contadas ocasiones, y para llevar a cabo las pruebas pertinentes, muchas escuderías han destinado importantes sumas de dinero a la evolución de sus simuladores, incorporando en plantilla pilotos profesionales destinados únicamente al simulador.
Un simulador es una especie de “videoconsola” con una tecnología punta que es capaz de reproducir las condiciones y el comportamiento de un monoplaza hasta el punto de ser sensible a la introducción de nuevos apéndices aerodinámicos en el monoplaza o cambios en los reglajes del coche. En definitiva, un simulador bueno, debe ser capaz de transmitir al piloto las mismas sensaciones que el monoplaza le transmitiría en pista. De este modo, su importancia es clave no sólo para evolucionar el coche, sino para poder preparar los reglajes básicos para cada carrera y ser capaz de enfocar los entrenamientos libres con buena parte del trabajo realizado ya en fábrica.