Canción sobre una flor
permanecer así cuando ya no estuvieran en este
mundo. Yo quería que para ellos la película
también estuviera hablada en una lengua incomprensible, para que pudieran entender la puesta en
escena. Pero entendían perfectamente todo lo que
se decía. Así te respondo.
SB: ¿Y respecto a Vertov y a Peleshyan, son
cineastas significativos para ti?
OI: Los cortometrajes de Peleshyan los vi y a
Vertov no lo conozco… ¡Ah, Dziga Vertov! No,
dejame en paz con eso, no me hagas hablar de
Dziga Vertov. En primer lugar: era propagandista
del leninismo-estalinismo. Segundo: era un mentiroso. Tercero: todo el tiempo hacía trucajes, no
filmó un solo plano normal y humano. Peleshyan
es otra cosa, es un buen cineasta y continúa haciendo cortometrajes. Si le gusta, por qué no.
EC: Espléndido. Quería preguntarte por esta
cuestión de que la gente hable una lengua incomprensible o que el diálogo no esté en primer plano,
es lo que yo recuerdo de tu film francés Los favoritos de la luna [1983] en que las acciones físicas
contaban toda la historia y había una banda sonora
donde de vez en cuando se entendía alguna
palabra, no estaba esa artificialidad de que la gente
no hable, pero al mismo tiempo lo que importaba
era la acción física.
OI: Cuando yo llegué a Francia hice una primera
película de 40, 50 minutos, un cortometraje que
filmé en el País Vasco francés [Euzkadi été, 1982].
Después hice un estudio que se llamaba Siete
piezas para el cine en blanco y negro [1983].
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Abril
Ambas estaban filmadas en una lengua incomprensible. Para el film del País Vasco respetamos la
lengua vasca y para los franceses era incomprensible. La segunda era totalmente muda, era un
estudio sobre París completamente mudo acompañado de sonido. Después hice una película en
Francia que se llamaba Bandidos: Capítulo 7
[1996], hablada en ruso y en georgiano. También
hice otra película, en Francia, llamada Seule,
Georgie [1994], para la televisión, narrada en ruso,
en francés, en inglés, en italiano y en georgiano.
Ahí contaba todo lo que pasaba entonces con ese
pobre país, cuatro horas de televisión. Finalmente
hice Chantrapas [2010], donde se habla dos tercios
en georgiano y un tercio en francés. Para los
franceses la subtitulé, aunque la idea no me gustara, y para los georgianos la doblé con una única voz
en off tranquila, sin emociones, para que entendieran y no tuvieran que distraerse con los subtítulos.
Este método para hacer cine sonoro… Yo les
puedo contar la historia de por qué sucedió esta
desgracia. La desgracia provino de los ingenieros y
de los comerciantes, ambos se complotaron. En el
cine mudo había un pianista, había una orquesta
tocando la música que había sido escrita especialmente para la película. Después hubo una época en
que la película era acompañada por discos en
vinilo, se ponía la púa, se ponía el disco en el
momento de la primera imagen y empezaba a
correr, el proyeccionista quitaba la púa cuando no
debía oírse nada y luego la volvía a poner cuando
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