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Métodos de enseñanza
4 Métodos para ¡a usiniüación de conochnientos y el desarrollo cognitivo
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Si pongo uii poco de arena en el fondo de esta taza y en-
cima de ella pongo un poco de azúcar y lo revuelvo con
una cucharilla, la arena y el azúcar se mezclarán, ¿no es
cierto?
H: Sí, pero papá... ¿te parece bien hablar de "mezclado"
cuando comenzamos a hablar de "revuelto"?
P: Sí, porque supongamos que alguien piensa que es "más
arreglado" colocar toda la arena debajo de todo el azúcar.
Y si quieres, no tengo inconveniente en decir que yo
pienso de esa manera.
H: ¿Hace falta que alguien diga algo así para que puedas
seguir hablando de cómo se mezclarán las cosas cuando
las revuelvas?
P: Sí... ahí está precisamente el punto. Las personas dicen lo
que esperan que suceda, y yo les digo que no sucederá
porque hay muchas otras cosas que podrían suceder. Y yo
sé que es más probable que suceda una de las muchas
otras cosas, y no de las pocas que esperan.
H: Papá, tú no eres más que un viejo escritor de libros, que
apuestas a todos los caballos menos al único al que quiero
apostar yo.
P: Es cierto, querida. Yo les hago apostar según lo que lla-
man "arreglado" -sabiendo que hay muchas "maneras
revueltas"- y por eso, verán que las cosas se encaminarán
hacia el revoltijo y la mixtura.
H; Entonces tú quieres que yo diga "arreglado" -que es de una
sola manera- y no revuelto. ¿Pero, por qué no lo dijiste al
comienzo, papá? Yo lo hubiera podido entender
perfectamente.
P: Supongo que sí. Pero ahora tú lo comprendes. Y ya es hora
de irse a la cama. El desarrollo de este proceso facilita al maestro o profesor el
conocimiento de cómo piensan, sienten y valoran sus alumnos.
Asimismo, facilita la orientación hacia un mayor nivel de
comprensión, entendiendo que es mejor que ellos mismos des-
cubran nuevos significados en lugar de "dárselos hechos".
El método puede desarrollarse entre dos personas (maestro y
alumno) o en el conjunto de un grupo de alumnos, para el
aprendizaje compartido. En este último caso, los intercambios de
significados se enriquecen aún más, por la mediación del grupo de
aprendizaje.
La secuencia general del método de diálogo reflexivo es:
Adaptado deGregory Bateson, "Metálogos", Si bien el diálogo reflexivo apunta a la elaboración de con-
ceptos y significados, debe destacarse que éstos varían en fun-
ción del contexto interpretativo o de la situación. Esto no es un
obstáculo, sino una rica alternativa para estimular la flexibilidad
cognitiva. Desde el punto de vista social, facilita la comprensión
de la diversidad, de otros ambientes y culturas.
El rol de quien enseña es importante en este método, de-flnido
como facilitador y promotor de la reflexión conjunta.
en Pasos hacia una ecología de la meiüe,
But'nps Aires, Lohlé- Lumen, 1998-
El modelo de interacción en el diálogo reflexivo, entre quien
enseña y quienes aprenden, es horizontal y personalizado. Quien
enseña conserva el rol de guía, acompañando y orientando el
proceso de pensamiento a través de nuevas preguntas y nuevos
ejemplos.
Fases
Actividades
Apertura Lanzamiento de una pregunta, un problema o una difi-
cultad. Puede surgir de los alumnos o del docente, pero
siempre es un punto de partida.
Desarrollo Conversación guiada reflexivamente siguiendo el
proceso de pensamiento y estimulando la participa-
ción reflexiva de todos los participantes.
Recapitulaciones Recuperación
progresiva
de
las
distintas
re-ftexiones, retomándolas e ir avanzando en la in-
tegración.
Síntesis Elaboración de un significado común, sin dejar al
margen las diferencias o discrepancias, arrojando
nuevas alternativas.
Transferencia Aplicar el acuerdo al análisis de nuevas situaciones en
distintos contextos. ¿Cómo se resolvería en otro lugar o
ambiente? ¿Sería lo mismo para otros?