INSPECCIÓN POSTMORTEM
3. Inspección de carcasa. Se examina visualmente el estado
de las serosas, el color, la higiene y cualquier posible
anormalidad que pudiera detectarse. En caso de ser
necesario, se palparán e incidirán los músculos del
esqueleto, la grasa, el tejido conjuntivo, los huesos, las
articulaciones, las vainas, los tendones y cualquier otra
parte de la carcasa.