Desarrolla la sabia actitud de la obediencia y veras las bendiciones. Una mujer que use el método del silencio para aprender y para enseñar, es considerada sabia. De lo contrario es insidiosa, rencillosa y sensitiva. La mujer alabada por Dios y por el marido, es la que sabe oír, se dedica a escuchar y ejerce la enseñanza sin palabras con sabias acciones y modestas razones. Así se ataviaban aquellas santas mujeres. Su ornato era el interno, de un espíritu afable y apacible. Es decir, su ornamento era el silencio sabio y la sujeción dispuesta. Las mujeres que traspasan la historia y rebasan los estándares comunes, son las piadosas que se visten de gracia y se llenan de hermosura. El silencio es una de las bellezas de una mujer piadosa y uno de los ornatos que un hombre valora. La sujeción es la corona de una mujer sabia y el método más útil para ganar a su marido incrédulo. ¡Deja de hablar tanto, guarda silencio! ¡Deja de defenderte, buscar razones y apabullar con estridentes argumentos, comunes a las mujeres del mundo! Usa los argumentos de las mujeres sabias y virtuosas. Silencio, obediencia y sujeción. Este sería el verdadero SOS para ustedes que desafía las instituciones y bendice a la iglesia y la familia.
Recuerda que la mujer sabia es la que edifica, mientras las necias destruyen. No seas hallada una mujer necia. Mujer virtuosa quien la hallará, porque necias hay por montones. Mujer sabia dónde está, porque impías abundan. ¡Por favor, usen el método del silencio y verán los resultados! Ora, medita, aprende y enseña en silencio. Una mujer sabia cuando rompe el silencio tiene razones prudentes y dignas de ser escuchadas. La mujer bochinchera, cansa, aturde, ofende y aleja. ¡Aprende el lenguaje y método del silencio! ¡Sujétate a sus bondades con dispuesta voluntad! Recuerda que el método del silencio termina la confrontación. En últimas si quieres controlar; guarda silencio. Las sabias acciones de la mujer piadosa, mantienen el control y rinden dividendos a su favor, además, de redundar para la gloria del Señor. ¡Basta ya de usar métodos hostiles, descalificativos, competitivos y ofensivos contra los hombres! ¡No compitan por argumentos, tomen el lugar del silencio! ¡No busquen razones, estén en sumisa disposición a su voluntad y el Señor les honrará! La realización de la mujer cristiana, viene cuando usufructúa los dividendos jugosos de su sabio llamado y el método eficaz del evangelio.
4. UN PECADO: DENUNCIAR
El SOS, entendido como silencio, obediencia y sujeción es un desafío primigenio, porque es una condición que ha gobernado la vida de la mujer. Desde Edén, vemos que quien fue creada para ser ayuda idónea, lo cual implica, entre otros aspectos: guardar silencio, obedecer y estar sumisa, se levanta contra el diseño, contra el diseñador y abre la puerta al pecado. La biblia claramente registra que ella fue creada después de Adán, es decir, para que permanezca en SOS y también que ella fue engañada. Entonces su creación y su pecado; son dos razones análogas a su condición y su misión vital.