BRUJULA CIUDADANA Agenda social y entorno global | Page 23

1. P olítica social y económica : una agenda que demanda soluciones 21 forma– tal como se concluye del análisis de los múltiples documentos y de la legislación. Se anunció la autonomía de gestión de las escuelas, para manejo de recursos (promesa no concretada todavía) y el mejoramiento de la infraestructura (donde se ha avanzado lentamente), pero no la necesaria redefinición curricular, ni -mucho menos- una estrategia de fortalecimiento de la escuela y de combate a la desigualdad en los procesos y resultados educativos. En las acciones desplegadas en el ocaso de la administración gubernamental actual, agrupa- das en el tardío programa sectorial denomi- nado nuevo modelo educativo, hay un discurso a favor de la equidad (muy por debajo de los mandatos de la Ley General de Educación que desde 1993 dedica un capítulo completo a esta obligación del Estado), pero no hay compromisos para transformar realmente las escuelas multigrado, las telesecundarias, los telebachilleratos o los Cursos Comunitarios bajo responsabilidad del Consejo Nacional de Fomento Educativo (CONAFE). Múlti- ples investigaciones han demostrado que es generalmente la población más pobre y más marginada del país la que tiene los servicios educativos más precarios. Una política de fortalecimiento de la escuela tendría que comenzar por combatir la desigualdad en la calidad de los servicios educativos bajo el principio de equidad: dar más y mejor a los que menos tienen. Solamente así puede ser una aspiración plausible la igualdad de oportunidades. Tercero. La reforma se fundó en la descon- fianza hacia el magisterio y hacia la escuela pública y, también, en la desconfianza hacia las autoridades de los estados. Esta última valoración justificó la recentralización de la administración del presupuesto para educa- ción que se destina principalmente al pago de remuneraciones al personal que trabaja con los estudiantes, además de quienes realizan tareas de mantenimiento, administrativas y apoyo en general; así, se creó el Fondo Nacional de Nómina y Operación Educativa (FONE) 9 . Actualmente, ni siquiera entre los gobiernos estatales hay suficientes aliados de la reforma, porque en los hechos, y con un discurso federalista, se impulsó el centralismo administrativo y presupuestal. Es necesario revisar esta cuestión. Mexicanos Primero y asociaciones afines, de matriz y sustento empresarial, alimentaron un clima de desprestigio hacia el magisterio y 9 En diciembre de 2013 el poder legislativo aprobó la iniciativa del poder ejecutivo que creó el FONE, mismo que sustituyó al Fondo de Aportaciones a la Educación Básica (FAEB)