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Los retos actuales de la
formación docente
en la modalidad a distancia
Actualmente la Educación a distancia ha tenido un auge considerable, con la incorporación de las tecnologías de la información al aprendizaje, la formación académica en cualquier nivel puede llegar a lugares geográficamente apartados sin hacer distinción entre edad o género, pues solo es necesario tener un equipo de cómputo y una conexión a internet para tener acceso a la educación.
Para hablar de educación de calidad, es necesario que se cuente con una estructura pedagógica, con contenidos y actividades basados en el logro de objetivos específicos y que los cursos estén diseñados de tal forma, que el participante pueda obtener un aprendizaje realmente significativo, es decir, que no por ser una modalidad a distancia carezca de elementos básicos de enseñanza-aprendizaje.
Por lo tanto, si se desea lograr que un curso cuente con la estructura adecuada, es necesario que los docentes de cursos en línea, desarrollen competencias académicas, sociales, de organización de actividades, competencias encaminadas a orientar y conocimientos en TIC, pues, aunque se trata de profesores a distancia, es decir que sus actividades son mediadas por computadora, deben realizar una planeación didáctica, diseñar y colocar actividades en las plataformas educativas con base en objetivos de aprendizaje, fomentar el uso de las tecnologías, brindar seguimiento a los estudiantes a su cargo, solucionar conflictos en el grupo, propiciar la comunicación docente-alumno, alumno-alumno y alumno-docente, teniendo como función principal: promover el aprendizaje.
Así mismo, el perfil docente actual de la modalidad a distancia, demanda una formación constante en cuanto a preparación profesional, profundización y ampliación de conocimientos sobre el área que se imparte, metodología educativa, flexibilidad al cambio y actitud favorable a la innovación educativa, donde el asesor debe centrar su atención en el estudiante.
Considerando lo anterior, la práctica cotidiana del docente en línea no dista mucho de un docente presencial, siendo la más grande diferencia la “modalidad” en la que se comparten los conocimientos, sin embargo, dentro de los retos de los docentes a distancia, se encuentra el promover su labor cotidiana, capacitación constante, el apropiarse del término “Docente” y disminuir la creencia de que no son profesores quienes imparten cátedra a distancia, ya que el estar a cargo de un grupo de educación en línea representa un trabajo profesional igual o de mayor demanda que en la educación presencial y si bien es cierto que todos venimos de una educación presencial en alguno de sus niveles (básico, medio o medio superior) quienes laboran en esta actividad lo hacen con la metodología de la educación a distancia, cubriendo las necesidades y requerimientos de esta población, tomando en cuenta los avances y necesidades educativas actuales, y en conjunto hacen de la modalidad a distancia una opción de formación académica de calidad a la que toda la población puede tener acceso.
Judith Rivera Baños
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