Bitácora Educativa portafolio | Page 27

estructura que ordena diferentes elementos, en este caso, sensaciones. En otras palabras, los elementos sensoriales pueden ser los mismos para dos personas pero ambas pueden ordenarlos de manera distinta en su mente lo que significa que los mismos elementos ocupan lugares diferentes en la mente de cada uno: en suma, ambas tienen percepciones distintas del mismo elemento o proceso. Pero lo interesante es intentar llegar más allá y preguntarse porqué dos personas ordenan de manera diferente sus sensaciones, es decir, porqué tienen percepciones diferentes del mismo fenómeno. Una posible respuesta es la información que cada uno maneja y que se pone en juego en el sistema. Una información que proviene de los genes, de la biografía y de la experiencia social de cada uno. Otra respuesta es más simple: es un fenómeno que, simplemente, ocurre. Especialmente lo vivo, tiene la capacidad de autoestructurarse para mantenerse a sí mismo. Lo que Maturana llama autopsiéis. ¿Y porque? Quizás simplemente porque tiene deseos de hacerlo. Es evidente que si desintegramos un motor y ponemos todas sus piezas en una mesa, éstas no tienen ningún deseo de armarse, de estructurarse en un motor. La materia viva puede tenerlo. Y el ser humano, especialmente. Trataremos de describir, a partir de estos elementos básicos, cómo se desarrolla el aprendizaje, cual es la naturaleza de este proceso. Para lograr una primera aproximación recurriremos a tres conceptos que parecen ser los más poderosos para su comprensión: el concepto de equilibración aportado por Jean Piaget y el concepto de asimilación y de acomodación (ver Gruber y Voneche, 1977). Es necesario no perder jamás de vista que esos conceptos fueron elaborados en el marco de una teoría de la inteligencia. Cuando Piaget utiliza esos conceptos, lo hace para dar cuenta del proceso por el cual se transforma un tipo particular de estructuras cognitivas que son los esquemas operatorios o los modos de funcionamiento o capacidades cognitivas. Pero, estos mismos conceptos, ese mismo marco teórico, puede usarse para dar cuenta del proceso de transformación 8 de otros tipos de estructuras cognitivas que los sicólogos llaman representaciones proposicionales; estas no son capacidades cognitivas sino que son representaciones que tienen un contenido (representación “de alguna cosa”), que implican una interpretación de la realidad y que se expresan con el lenguaje. La equilibración De acuerdo con Piaget, la inteligencia es una forma de adaptación del individuo a su entorno. Se trata de un fenómeno dinámico que se desarrolla a través de múltiples interacciones entre el sujeto y su medio. Además, este desarrollo tiene siempre una finalidad: la búsqueda constante de una adaptación o de un equilibrio nuevo. En otras palabras, en su relación con el medio, cada sujeto se enfrenta constantemente ante la necesidad de enfrentar situaciones nuevas que desequilibran su relación; en ese sentido, se puede afirmar que la inteligencia es la búsqueda permanente del equilibrio entre el sujeto y su medio. Ese es el proceso de equilibración. La asimilación La asimilación es el proceso por el cual un objeto nuevo, una información nueva, es incorporada en una estructura cognitiva de acogida pre-existente; dicha estructura es movilizada en la situación de confrontación y se transforma una vez que se produce la incorporación de la nueva información. Lo importante de destacar aquí es el hecho de que una información nueva sólo puede ser asimilada por el sujeto si ella puede ser “enganchada” a una estructura de acogida. Si dicha estructura no existe, la nueva información carece de sentido para el sujeto y por lo tanto no es asimilada. Finalmente, una vez asimilada la información, ésta producirá una modificación en la estructura cognitiva de origen; en otras palabras, la estructura se acomodará. La acomodación Podemos identificar tres aspectos esenciales en el proceso de acomodación. En primer lugar, para que la estructura cognitiva de origen cambie, la información que ingresó tiene que ser capaz de movilizarla, debe ser capaz de enganchar en ella; es decir, debe ser compatible con dicha estructura y de encontrar sentido en ella. En segundo lugar, una vez asimilada en la estructura cognitiva de acogida, la información se transforma progresivamente. En el sujeto operan mecanismos de selección y de organización de la información; se trata de la necesidad de darle coherencia y sentido. Este proceso de transformación de la información se traducirá, de esa manera, en una transformación 27