el ingeniero Fabrizio Federici logró
vistas impresionantes del instante
cuando se hizo añicos la parte central
del puente. En su momento fueron contribuciones fundamentales para el
análisis de los segundos finales de la
vida de la obra. La secuencia de ambas
tomas las publicó El Universal en forma
exclusiva.
Simón Quevedo, habitante del
Barrio Nueva Esparta, cercano al primer tramo de la autopista Caracas-La
Guaira, fue impactado por el estruendo que se sintió durante el colapso de
la estructura. Certificó con una frase
no sólo el asombro, sino la magnitud
del suceso: « el viaducto se cayó de repente». La inmensa nube de polvo nubló su vista.
Una comisión de la contratista
constructora francesa había avalado
todo lo que se hizo para salvar la vida
útil del viaducto.
Después de la trocha
Tras el quiebre del puente que
dejó incomunicada a la capital con el
estado Vargas en septiembre de 2005,
la constructora Precomprimido -fundada en Caracas el año 1951- fue seleccionada para efectuar lo que parecía
imposible: realizar el viaducto, de casi tres veces más de longitud que el
anterior, en menos de dos años. La
tarea no era fácil pero la experiencia
de haber construido veinte obras en
este renglón -entre puentes y viaductos- dejaba claro la confianza de la
calidad del producto q