Gastronomía y turismo – Destinos con sal y pimienta
Una bienal mantiene sus puertas abiertas por períodos que pueden variar desde un mes hasta 3 ó 4 meses, lo cual permite la sostenida afluencia de público extranjero y del turismo nacional. Esto implica un staff fijo trabajando en diversas tareas en los predios y en el mantenimiento técnico de las obras. En general las bienales suelen tener propuestas artísticas donde lo tecnológico se despliega de modos significativos, desde dispositivos para mostrar arte digital, videos, propuestas sonoras, hasta instalaciones que involucran una fuerte interactividad mediante internet, conexiones en tiempo real, etc. Asimismo ese staff fijo deberá trabajar para lograr el sostenimiento de la actividad pedagógica y de los programas de visitas guiadas tanto para instituciones educativas como para el público en general.
En cuanto al calendario, se puede decir que en general existe un ritmo de alternancias, si bien se producen algunas pocas superposiciones de fechas especialmente en los casos de bienales próximas desde el punto de vista geográfico, gracias a lo cual el turismo especializado en arte puede gozar de paquetes turísticos que le permitan visitar dos o tres bienales a costos relativamente bajos. Tal es el caso de la Bienal de Venecia( Italia), el Skulptur Projeckte de Münster( Alemania) y la Documenta de Kassel( Alemania) que cada 10 años coinciden en sus fechas.
CRÍTICA A LAS BIENALES
La bienalización
En las últimas décadas han crecido de manera asombrosa tanto la cantidad de bienales de arte contemporáneo, como el impacto que éstas están teniendo en el mundo del arte en cantidad de asistentes y movimientos mundiales de arte y artistas. Las bienales son estudiadas y ponderadas por los críticos y teóricos por sus potencialidades políticas, artísticas y curatoriales. Sin embargo es evidente que las bienales son una industria floreciente por sus potencialidades económicas, un mercado para el comercio y el turismo y el aspecto de la“ economía de la experiencia” de la economía global.
Elena Filipovic, Marieke van Hal y Solveig Øvstebø, todas ellas curadoras de bienales en la obra( van Hal et al., 2010) plantean que se puede argumentar que las exposiciones bienales se han revelado de algún tiempo para acá como el medio por excelencia a través del cual llega a conocerse la mayor parte del arte contemporáneo; y esto es un hecho, independientemente de qué actitud se adopte frente a él o cómo se lo conciba. La aparición de nuevas bienales está contribuyendo a la construcción de un mundo internacional y global del arte, que cuenta con importante cantidad de capitales, representación e identidad cultural, artistas y curadores, es decir, conceptos y mercancías.
390