selección (seleccionar más hijos entre un número
cada vez menor de yeguas genéticamente supe-
riores), como en ningún otro lugar en el mundo. Tal
es así que actualmente más del 70% de su produc-
ción en pureza de la raza esta realizada mediante
técnicas de trasferencia embrionaria, siendo ade-
más la única raza equina en la cual la clonación
de animales con fines deportivos y reproductivos
es una realidad. Un ejemplo de esta aseveración
lo constituye el hecho que en los últimos 4 años se
han inscripto 55 clones dentro del libro de registros
de la raza y su número se incrementará de manera
notable durante los próximos años.
Sin embargo, poco se ha indagado respecto a
cómo aumentar la superioridad deportiva de nues-
tros caballos bajo la tecnología del mejoramiento
genético moderno, con el objeto de maximizar la
rentabilidad del criador. Aunque es bien conoci-
do que ciertos caballos frecuentemente utiliza-
dos producen una descendencia superior, es muy
poco lo que se sabe del “mérito genético animal”
de muchos otros animales actualmente utilizados
como reproductores, más allá del hecho de ser hi-
jos de tal o cual padre, o que pertenecen a una de-
terminada “línea” genética. Este desconocimiento
conlleva, a menudo, a resultados inesperados e
indeseables.
La era de la genómica en
los animales domésticos
En la última década se viene asistiendo a una ver-
dadera revolución en el conocimiento del genoma
de las diferentes especies, lo cual se ha denomina-
do comúnmente como la “era de la genómica”. Sin
embargo, el genoma del caballo ha sido dilucidado
más tardíamente que los demás animales domés-
ticos, debido a la falta de interés de los consorcios
científicos mundiales que se han centrado en ani-
males de consumo. Sin embargo, el desarrollo de
69