Antología 10 películas de Disney basadas en historias no aptas para antologia cuentos basadas en peliculas | Page 8
vida a mí misma. Se dirigió entonces a una habitación escondida y solitaria a la que nadie
podía entrar y fabricó una manzana envenenada. Exteriormente parecía buena, blanca y
roja y tan bien hecha que tentaba a quien la veía; pero apenas se comía un trocito
sobrevenía la muerte. Cuando la manzana estuvo pronta, se pintó la cara, se disfrazó de
campesina y atravesó las siete montañas hasta llegar a la casa de los siete enanos. Golpeó.
Blancanieves sacó la cabeza por la ven-tana y dijo: -No puedo dejar entrar a nadie; los
enanos me lo han prohibido. -No es nada -dijo la campesina- me voy a librar de mis
manzanas. Toma, te voy a dar una. -No-dijo Blancanieves -tampoco debo aceptar nada. ¿Ternes que esté envenenada? -dijo la vieja-; mi-ra, corto la manzana en dos partes; tú
comerás la parte roja y yo la blanca. La manzana estaba tan ingeniosamente hecha que
solamente la parte roja contenía veneno. La be-lla manzana tentaba a Blancanieves y
cuando vio a la campesina comer no pudo resistir más, estiró la ma-no y tomó la mitad
envenenada. Apenas tuvo un trozo en la boca, cayó muerta. Entonces la vieja la examinó
con mirada horri-ble, rió muy fuerte y dijo.
-Blanca como la nieve, roja como la sangre, ne-gra como el ébano. ¡Esta vez los enanos no
podrán reanimarte! Vuelta a su casa interrogó al espejo: ¡Espejito, espejito de mi
habitación!
¿Quién es la más hermosa de esta región? Y el espejo finalmente respondió. La Reina es la
más hermosa de esta región. Entonces su corazón envidioso encontró repo-so, si es que
los corazones envidiosos pueden en-contrar alguna vez reposo. A la noche, al volver a la
casa, los enanitos en-contraron a Blancanieves tendida en el suelo sin
www.grimmstories.com 3 que un solo aliento escapara de su boca: estaba muerta. La
levantaron, buscaron alguna cosa envenenada, aflojaron sus lazos, le peinaron los
cabellos, la lava-ron con agua y con vino pelo todo esto no sirvió de nada: la querida niña
estaba muerta y siguió están-dolo. La pusieron en una parihuela. se sentaron junto a ella y
durante tres días lloraron. Luego quisieron enterrarla pero ella estaba tan fresca como una
per-sona viva y mantenía aún sus mejillas sonrosadas. Los enanos se dijeron: -No
podemos ponerla bajo la negra tierra. E hi-cieron un ataúd de vidrio para que se la pudiera
ver desde todos los ángulos, la pusieron adentro e inscribieron su nombre en letras de oro
proclamando que era hija de un rey. Luego expusieron el ataúd en la montaña. Uno de
ellos permanecería siempre a su lado para cuidarla. Los animales también vinieron a
llorarla: primero un mochuelo, luego un cuervo y más tarde una palomita. Blancanieves
permaneció mucho tiempo en el ataúd sin descomponerse; al contrario, parecía dor-mir,
ya que siempre estaba blanca como la nieve, roja como la sangre y sus cabellos eran
negros como el ébano. Ocurrió una vez que el hijo de un rey llegó, por azar, al bosque y
fue a casa de los enanos a pasar la noche. En la montaña vio el ataúd con la hermosa