JAVIER PICHARDO SERVIN Las ONG en contra de la siembra de maíz genéticamente modificado en Oaxaca
79 publicar información proveniente de estudios, investigaciones y advertencias científicas que circulaban en otros países, organizando las primeras reuniones de información sobre los riesgos de los OGM y en específico de la siembra de maíz GM( Marielle, 2007).
En 1999, el gobierno estableció una moratoria que prohibía la siembra experimental y comercial de maíz GM, por ser el país centro de origen y diversidad de este cultivo( Massieu y Verschoor, 2010). De igual forma, Greenpeace inició una campaña en sobre los posibles riesgos del maíz GM, pero es:
a partir del Primer Foro Nacional del Biotecnología y Bioseguridad en la Agricultura en México que comenzó el proceso de formación de la oposición anti-transgénica en México, así como la polarización del debate, el cual se agudizó con la denuncia de Quist y Chapela( 2001) sobre la contaminación del maíz nativo con transgenes en las milpas de Oaxaca( Barajas y González, 2013:26).
Después del anuncio de Quist y Chapela sobre la contaminación ilegal, el debate sobre la siembra de maíz GM cobró una perspectiva nacional, marcando un punto de quiebre y desencadenando la respuesta social en muy distintos niveles, detonando la organización social y la integración de distintas luchas regionales y locales, de comunidades y organizaciones en la Red en Defensa del Maíz, a partir del“ Foro en defensa del maíz” convocado por el Centro de Estudios para el Cambio del Campo Mexicano( CECCAM) en 2002.
Se fueron consolidandolas alianzas entre organizaciones sociales, campesinas y ambientales, que demandaron al gobierno federal hiciera públicos los estudios sobre el grado de contaminación transgénica del maíz nativo y los planes para enfrentarla( Marielle, 2007). Algunas organizaciones solicitaron e impulsaron la realización de estudios independientes, como el solicitado a la Comisión para la Cooperación Ambiental( CCA), pidiendo una moratoria indefinida ante la opacidad del gobierno sobre el tema.
En 2003 representantes de comunidades indígenas, campesinas y ONG, dieron a conocer los resultados de sus propios análisis sobre la presencia de contaminación transgénica de maíz en nueve estados del país: Chihuahua, Morelos, Estado de México, San Luis Potosí, Puebla, Oaxaca, Hidalgo, Tlaxcala y Veracruz.
Tras la aprobación de la Ley de Bioseguridad de Organismos Genéticamente Modificados( LBOGM) en 2005-nombrada por algunas ONG como“ Ley Monsanto”- se fortalecieron las redes nacionales e internacionales. A partir de