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ROSALÍA VÁZQUEZ TORÍZ
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YAREHD CAPORAL G.
La agricultura urbana como espacio de recuperación y resignificación del modo de vida campesino
urbana no sólo se pretenden producir alimentos, generar empleos o reducir
la degradación ambiental, también se busca ensayar formas de convivencia
social, que inspirados en otras matrices civilizatorias y modos de vida, se
valore el bien común y la sostenibilidad de la vida.
1. Agricultura Urbana y Periurbana: de su concepto y alcances
Frente al hambre que padecen alrededor de mil millones de personas en el
mundo y que en México, de acuerdo con datos oficiales, alcanza a cerca de
la mitad de su población, las prácticas agrícolas campesinas se presentan
como fuente de soluciones. De hecho, diversos investigadores, instituciones
y organizaciones de la sociedad civil coinciden en reconocer que este tipo de
agricultura hoy proporciona una cantidad importante de todos los alimentos
que se consumen en el mundo:
Los aproximadamente tres mil millones de indígenas y productores campesinos
—rurales y urbanos, pescadores y pastores— alimentan no sólo a la mayoría
de la población mundial y a la mayoría de los desnutridos del mundo, sino
que también crean y conservan la mayor parte de la biodiversidad mundial y
representan la mejor defensa que podemos tener contra el cambio climático
(ETC Group, 2013:5).
Desde estos espacios asimismo se destaca la importancia de reconocer
y fortalecer a las prácticas agrícolas campesinas para la construcción de la
soberanía alimentaria, opción que diversas organizaciones y académicos
colocan frente a la crisis alimentaria y el control productivo y comercial de
las grandes empresas en el sistema alimentario mundial. Al respecto, Miguel
Ángel Altieri afirma:
Por suerte, todavía subsisten miles de pequeñas explotaciones tradicionales
dispersas en los paisajes rurales de todo el mundo. La productividad y
sostenibilidad de estos agrosistemas se puede optimizar con métodos
agroecológicos, que de esta manera pueden formar la base de la Soberanía
Alimentaria, definida como el derecho de cada nación o región para mantener
y desarrollar su capacidad de producir cosechas de alimentos básicos con la
diversidad de cultivos correspondientes. El concepto emergente de Soberanía
Alimentaria enfatiza el acceso de los agricultores a la tierra, las semillas y el
agua, se enfoca en la autonomía local, los mercados y los ciclos de consumo
y de producción locales, la soberanía energética y tecnológica, y las redes
de campesino a campesino (Altieri, 2010:29).
En este amplio escenario donde lo campesino es valorado, diversos actores
sociales urbanos están recuperando y recreando prácticas agrícolas campesinas