Sin embargo, esta práctica implica importantes riesgos medioambientales, así como la radioactividad, contaminación en mantos acuíferos, el gasto desmedido de agua, destrucción del ambiente, contaminación acústica a causa del trabajo de perforación y taladrado, y hasta sismos gracias a la alteración de las capas de la tierra. Inclusive, la Agencia Medioambiental Estadounidense publicó un informe donde afirma que los líquidos utilizados para el fracking son tóxicos. Pero, ¿cómo surge esta práctica?
En 1986, se realizó la primera excavación horizontal con éxito en un yacimiento de 600 metros para extraer gas shale en el condado de Wayne, Virginia Occidental. No obstante, esta excavación fue en base a una investigación, y por primera vez se realizó la extracción de gas a nivel comercial en 1996, en el yacimiento de Barnett, Texas. Actualmente es una práctica que se lleva a cabo no solo en Estados Unidos, sino en distintos países del continente americano, entre ellos México.
La empresa petrolera estadounidense Stanolind Oil fue la primera en aplicar el fracking para extraer gas natural, pero no les resultó muy efectivo puesto que realizaron una perforación solamente vertical.Décadas después, en plena crisis del petróleo, Estados Unidos lanzó un proyecto de investigación llamado Eastern Gas Shales Project en donde comenzaron a investigar la exploración horizontal.
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