Alberzana Alberzana digital interactiva Nº2 | Page 64

magnitud y complejidad de San Cristó- bal, por la heterogeneidad de su oferta educativa. Esto requiere un gran Equi- po Directivo que ejerza el liderazgo pe- dagógico y de las diferentes áreas de la vida del Centro. La coordinación de ese equipo directamente por el Direc- tor es, tal vez, lo más importante que se debe desarrollar. Creo que la gestión del personal es de la máxima priori- dad: todos los agentes que intervienen en un centro educativo son personas y la convivencia de las personas es vital para alcanzar los objetivos que se pro- ponga el Centro. Vuelvo a subrayar la calidad y catego- ría del grupo humano de San Cristóbal como motor de los buenos resultados que viene presentando este Centro en términos generales. mente, al principio no sabes si tienes vocación o no para la enseñanza, pero si te entregas a fondo con tus alumnos, con las tutorías y con la preparación de las clases con el máximo rigor, rápida- mente descubres la dimensión huma- na de la educación como docente. Yo me dejé seducir por el deseo de sem- brar entre mis alumnos -sin esperar recoger- y, aun con las dificultades por las que tuve que pasar, he disfrutado mucho de mis clases y con mis alum- nos. Además, mi vida en el Ave María nos ha permitido a mi mujer, Pepita, y a mí, desarrollar nuestra familia jun- to a nuestros tres hijos. En la enseñan- za no se gana dinero, pero te permite disfrutar de una vida llena de valores compartidos con todas las personas que integran la comunidad educativa y eso no tiene precio. Desde el primer día, empecé dando clase a alumnos sordos. Fue una expe- riencia extraordinaria de la que apren- dí mucho. Creo que alcancé un buen 64 grado de entendimiento y de resulta- dos con este grupo de alumnos y siem- pre he guardado un gran aprecio por la Comunidad Sorda de nuestro Centro. P.: ¿Cuánto tiempo ha estado a cargo de la Dirección? R.: Como director de San Cristóbal he estado 13 años: desde octubre de 2004 hasta la finalización del curso ante- rior. Previamente, desempeñé las fun- ciones de Subdirección y de Jefatura de Estudios en Formación Profesional. En conjunto, han sido 33 años los que he estado ligado a las tareas de gestión. Han sido años muy intensos, llenos de acontecimientos que me han permiti- do vivir en primera línea toda la evolu- ción en este período de tiempo. He de decir que ha sido apasionante. P.: ¿Qué es lo más difícil de ser Direc- tor? R.: Ser director requiere mucha dedi- cación, sobre todo en un Centro de la P.: ¿Alguna vez sintió ganas de “tirar la toalla”? R.: En etapas anteriores viví situa- ciones excepcionales que ojalá nunca vuelvan a repetirse: diferencias en la convivencia, pérdida de unidades con el correspondiente reajuste de perso- nal, problemas económicos o alguna situación de violencia escolar, que ha- cen que te cuestiones si eres la persona más idónea para liderar un Centro co- mo el nuestro. Para disipar esos temo- res, lo mejor fue hablar compartien- do los problemas con las personas del Equipo Directivo o con el profesora- do, no tomar decisiones sin consultar la opinión de estas personas, buscando el mayor consenso y respaldo posible. No siempre se acierta al gusto de todos en general, pero creo haber ejercido esta práctica en las situaciones que lo requerían y siempre he encontrado el apoyo necesario para resolver los mo- mentos de mayor complicación. P.: Va a continuar siendo profesor. ¿Qué normas cambiaría en la educa- ción y por qué? R.: Creo que hay cosas que se están haciendo bien desde las Disposiciones www.sancristobal.amgr.es