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única línea racial-cultural del México moderno. De trata de imitar la forma de vida occidental y negar su este esquema contrastante, resultaría una identidad propia cultura: se suscita una patología psicológica fragmentada y conflictiva en extremo (ver figura 2). cuando el mexicano descubre su realidad y se crea un desajuste emocional entre lo que tiene (visto como inferior e inauténtico) y lo que quiere ser (visto como superior y original). Ramos nombra este fenómeno como sentimiento de inferioridad. Gran parte de los teóricos posteriores El proyecto anterior recibió críticas y revisiones en el país continuaron con un interés ontológico, que contenían sus propias propuestas. Aunque pero que se mezclaba con características peculiares, habría que matizar dicha reacción, pues, en algunos exageradas y generales adjudicadas al ente de estudio, momentos, se lanzó desde posiciones cobijadas por el cual era, comúnmente, un personaje marginal. Poco a poco fue desvaneciéndose esa barrera teóricoel poder gubernamental. determinista que alejaba al sujeto de análisis y lo Samuel Ramos, con El perfil del hombre y la volvía un tanto difuso, irreconocible, inadecuado, cultura en México (1934), abre las puertas de los a la par, para el individuo al que se le imputaba el estudios conocidos como de autognosis en los que modelo y para la colectividad a la que pertenecía. el mexicano15 no es simplemente punto de partida Detrás de ese esfuerzo intelectual que marcó y punto de llegada; existe ahí un fuerte intento por tomar lo mexicano, considerado como específico, pero gran parte del siglo, reside un deliberado reclamo que no se queda en esa fase inmediata, sino que busca por tomar la palabra nunca antes cedida en los foros los conductos para elevarlo hacia “la universalidad internacionales. Resultaba ilusorio ignorar el horror espiritual” (2001: 80). El filósofo une la psicología con la de las dos guerras mundiales que evidenciaban el filosofía y se interna en regiones íntimas del mexicano; estado de decadencia en el que se había involucrado experimento en el que se encuentra una disposición la otrora Europa protagónica, por tanto, había razones antropológica. Ramos hace una rápida revisión de de sobra para sacudirse el modelo impuesto del ser los momentos históricos más importantes de México. humano occidental, de tomar conciencia de lo propio Localiza un problema fundamental, para él, en la cultura y, en consecuencia, tomar el tema de el/lo mexicano mexicana dentro de los eventos de la Conquista y el como acuciante. La preocupación por el ser del mexicano, esto capítulo de la Colonia. La cultura española se impone en este territorio; el nuevo ente, resultado del mestizaje, es, por su humanidad, como problema filosófico ha el ser mexicano, llega al mundo y se encuentra con provocado, entre otras cosas, la crítica del porqué una cultura que él no creó, por lo que debe recurrir de esta pregunta. Nunca un Platón, un Descartes, un a dos etapas formativas: una de transplantación y otra Hume o un Kant, se objeta, se ha preguntado por el de asimilación. Bajo esta compleja condición germinal, ser del griego, el francés, el inglés o el alemán. Cuando México se ve envuelto por una cultura derivada, en hablan del hombre se refieren al hombre en general, la que los elementos indígenas originales solamente existen en el “inconsciente del espíritu” (Ibíd.: 29). En los episodios históricos posteriores, el mexicano 15 Tomamos el término genérico ‘el mexicano’ se refiere a ciertas formas de ser que se toman como propias de la cultura mexicana. 28