ISBN 0124-0854
N º 199 Junio de 2013 el oficial. Y muy pronto empezó a ser utilizado también como apelativo para la mujer que inspiró la canción.— Buenas tardes, Viuda Bonita. La Viuda Bonita sonríe, se reacomoda en su mecedora. Es evidente que disfruta explayándose en el tema. Es evidente que todavía hoy, a sus setenta y seis años, se siente a gusto como personaje del cancionero popular latinoamericano. Ella sabe— y lo dice engreída— que hay grabadas más de cuarenta versiones de la canción, y que entre quienes la han interpretado figuran el Gran Combo de Puerto Rico, Diomedes Díaz, la Charanga América y Carlos Vives. Por eso a estas alturas— advierte, orgullosa— está acostumbrada al asedio de la prensa. Para no ir muy lejos, ayer se pasó todo el día con un grupo de reporteros de Caracol Televisión. En este punto, ya entrada en gastos, recita de memoria la lista de periodistas importantes que la han entrevistado.
—¿ Usted cree que si Leandro no fuera ciego hubiera dicho en la canción que“ cuando Matilde camina, hasta sonríe la sabana”?
En vez de responder, súbitamente empieza a entonar el pasaje aludido:
Jagua
Matilde Lina, tomado de la revista SoHo, Bogotá, julio de 2011
Si ven que un hombre llega a la
coge el camino y se va pa’ El Plan está pendiente que en la sabana vive una hembra muy popular. Es elegante, todos la admiran y en su tierra tiene fama cuando Matilde camina hasta sonríe la sabana
La voz lozana de Matilde Lina contrasta con su apariencia de abuela. Cualquiera que oiga la grabación de este fragmento podría pensar que quien canta es una joven. Lo cierto, en todo caso, es que ella