ISBN 0124-0854
N º 198 Mayo de 2013
presencia. Pero no lo haces, y sigues embelesada en tu pensar … y me paro en frente tuyo, hacia donde diriges tu mirada y me miras y sonríes … y me agrada que lo hagas … yo sonrío y me voy y te olvido …
Gorda bella, también me olvidas … pero no te vayas nunca …
Señora Candelaria:
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Eliana Henao Ramírez
Hemos sabido que lo que pasa de las puertas hacia adentro de su casa es muy interesante y de mucho aprendizaje. Lo ideal sería que quienes habitan junto a usted, tan bello y expresivo lugar, hicieran de él un corredor de ideas que no sean estancadas por las imaginaciones estupefactas de la falta de dinero o de espacialidad.
Mi propuesta es entonces que tome partida de las propuestas hechas para decorar su casa, y que se haga más conciencia del aprendizaje y conocimiento, que no se estanque en temporadas tan largas, para que no se hagan monótonas las visitas a tan apreciado lugar, tan lleno de sensaciones y emociones vibratorias para mí.
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Santiago Yépez
Señora doña Cande: