Agenda Cultural UdeA - Año 2012 MARZO | Page 8

ISBN 0124-0854
N º 185 Marzo de 2012

El duelo del poeta Pushkin

Rubén Darío Flórez Arcila

H

acía mucho tiempo que en San Petersburgo un duelo no involucraba a tantos personajes. No era para menos. Antes de las nueve de la mañana de aquel día, buena parte de un círculo de dandis, cortesanos aventureros, mañosos y perversos aristócratas, así como de damas expertas en divulgar chismes que hacían la vida de la corte engañosa y brillante, recibieron una misiva. A primera vista se trataba de una broma malintencionada que, en realidad, fue la señal para el comienzo de un espectáculo de suposiciones y fatalidad anunciada. El 4 de noviembre de 1836, la carta escrita en francés, anónima y despiadada, anunciaba que Alexander Pushkin ingresaba como“ historiógrafo de la privilegiada orden de los cornudos”. Pushkin en persona recibió y leyó el agravio en la hoja de papel que contenía el funesto sobre lacrado.
Hasta este momento, Pushkin era nada más ni nada menos que el autor de una época que leía con emoción sus poemas que resultaban, si se descifraba su código secreto, un espejo del poeta. El Zar, Nicolás I, que había obligado a Pushkin a exiliarse de la capital, en un gesto de publicidad política para congraciarse con los lectores y escritores de Moscú y San Petersburgo, lo liberó del exilio para darle una audiencia en su palacio. El Zar salió de la entrevista pregonando a los cuatro vientos que había conversado con“ el hombre más inteligente de Rusia”.
Para embolatar las jugadas del destino, el poeta se entregaba de corazón al juego de las cartas que lo hacían sentir en la plenitud de la energía vital, aunque ello resultaba más cercano al verso de León de Greiff:“ juego mi vida, cambio mi vida, de todas maneras la llevo perdida”. Descifrando las claves ocultas de sus libros aparecen, como un aldabonazo, numerosas referencias a duelos. El personaje romántico de su más famosa novela muere en un duelo. Esta era una de las pasiones de su tiempo igual, que las guerras, las aventuras amorosas y la escritura de poemas.