ISBN 0124-0854
N º 166 Junio de 2010 pero el poeta no reconoce normas literarias porque su ley es el ritmo de la nota musical y del corazón obediente al canto del vaquero, al galope del caballo, a las plumas direccionales atadas a la flecha para dar al blanco del sentimiento:
¡ Ay mi vida! No creas que son cosas de juego yo soy un hombre perdido desde que te vi en San Diego. Te fuiste para el Molino, yo me vine para el Valle pero me dejaste herido y ahora tienes que curarme...
Rafael Escalona, foto tomada de la Revista 43. o Festival de la leyenda vallenata porque yo tengo un dolor adentro del corazón y un corazón herido, de curarlo es con cariño.
¡ Ay mi vida si vieras como suspiro cuando me paso de largo por el ramal del molino!
Porque debes darte cuenta que si por tu culpa muero, en todita la provincia, se dirá cuando yo muera, al pobrecito Escalona, lo mató una molinera.
( La molinera)
Desgarramiento emocional, inspiración que no se rige por los cánones de la prosodia académica pero que reconocían los viejos acordeoneros y que no alcanzan a imitar los nuevos canta-autores de la farándula comercial.
Manuel Zapata Olivella( Córdoba, 1920-Bogotá, 2004) es considerado el escritor más importante de lo que se ha denominado literatura afrocolombiana. Sus novelas más conocidas son: Tierra mojada; La calle 10; Detrás del rostro; Chambacú, corral de negros; En Chimá nace un santo, y Changó, el Gran Putas. El presente texto fue extraído de Homenaje Nacional de Música Popular 1998. Rafael Escalona, Bogotá, Ministerio de Cultura, 1998, pp. 75-77.