Agenda Cultural UdeA - Año 2010 DICIEMBRE | Page 22

ISBN 0124-0854
N º 172 Diciembre de 2010 sonrisa — maligna , para los pocos acostumbrados al desacato — era una estela que dejaba incluso cuando se refería a las cosas más graves , antes de desaparecer en el resguardo de su casa a voluntad . Como el gato de Lewis Carroll , desconcertaba con sus paradojas , pero éstas podían arrojar una suerte de encantamiento que protegía a los menos protegidos .
Monsiváis se escabulló no sólo del cortejo del poder , sino del acoso periodístico , aunque fuera una de las más populares figuras mediáticas . “ La intimidad es una embajada donde siempre me dan asilo ”, se preciaba . En la sala de prensa de la FIL era vox pópuli su recurso de evasión : más de una vez contestando el teléfono de su casa con su voz histriónica de ancianita sorda fingiendo ser la tía o la empleada y anunciando que , desafortunadamente , “ El señor Monsiváis ” acababa de salir . Esta vez está de salida , pero , como sentenció Carlos Fuentes , “ a Monsiváis ya lo hemos ganado para siempre ”.
José Emilio Pacheco imaginó un impredecible 2038 en que la FIL celebraría “ en su presencia ” el centenario de Carlos Monsiváis , y enumeró por centenares y miles los textos acerca de él que se escribieron , las conferencias , entrevistas concedidas , atribuyéndole no sólo haber escrito “ la obra cumbre de la maledicencia en lengua española ”, sino el famoso don de la ubicuidad que le habría permitido participar en una mesa redonda en Bellas Artes , ser entrevistado en televisión , contestar preguntas por la radio , y otras actividades realizadas simultáneamente .
“ Después de oír a José Emilio , tiendo a pensar que existo ”, fue la respuesta inmediata de Monsiváis . La obligación que nos deja , fuera de la celosa guarda y relectura de Amor perdido , su Nuevo catecismo para indios remisos , Escenas de pudor y liviandad , Los rituales del caos , Imágenes de la tradición viva , entre sus innumerables títulos , es la de no creer , cuando las cenizas de Monsiváis entren al recinto escogido en el Museo del Estanquillo , en su último acto de desaparición . Si hay alguna certeza en el México que anuncia su Apocalipstik es que su sonrisa de gato desobediente seguirá apareciendo una y otra vez en el tumulto de nuestra vida cotidiana .
1 Nota de la edición de Agenda Cultural Alma Máter . La expresión de Terencio es “ Soy hombre , nada de lo humano me es ajeno ” ( Homo sum , humani nihil a me alienum puto ).
Adriana Herrera es periodista , colaboradora habitual de la Revista Poder 360 ° con cuyo permiso publicamos este artículo . http :// www . poder360 . com / article _ detail . php ? id _ arti cle = 4457 & pag = 1 # ixzz0u3pkWNCW