ISBN 0124-0854
N º 134 julio de 2007
Recuerde usted u observe esas librerías, con sus mamotretos de a cinco pesos, empolvadas ya las partes superiores del rimero de hojas …
No; era preciso hacer que el libro fuera poderoso andarín, barato, de bolsillo. Marco Aurelio Arango en su Atlántida y usted en su Pluma de oro, han dado lo que necesitábamos en Colombia: ya no habrá esas ediciones colombianas que parecen todas informes de Asamblea, o bien, de cuadernillos gruesos, como si fueran sacos de cabuya doblados. ¡ Qué hermosas ediciones hace la Atlántida!
A su Pluma de oro entra ahora la muchacha que desciende de su automóvil, y que irá de paseo mañana domingo y que desea llevar un libro suave, consonante con sus emociones amorosas. Necesita un libro que la acaricie allá, bajo el boscaje antioqueño y que pueda dejar allá, tirado sobre la hojarasca, en recuerdo de su amor fugaz. Entra también el señor grave que se irá mañana en avión y que desea coger algunas ideas sobre derechismo o izquierdismo, para poder conversar en Bogotá, con“ esos jóvenes de los cafés y los ministerios”. Si no lo hiciere, ¿ cómo logrará que le otorguen la concesión para platanales en Urabá? El señor Cura entra también a buscar la biografía de Jesucristo, la de San Pablo o la de San Luis, para sus bellos sermones en el pueblo lejano … ¡ Todo ello por 0,40, 0,50, o 0,60!...
Reciba un abrazo por ese remanso del espíritu que tiene usted en Carabobo, precisamente en el rincón que forma una casa que se sale impertinentemente a media calle, como para atajar al judío antioqueño, diciéndole:“ Entre usted a La pluma de oro”.
* Fernando González.( Envigado-Antioquia,
1895-1964). Polémico escritor y pensador colombiano, autor de numerosas obras entre las cuales se cuentan: Viaje a pie, Mi Simón
Bolívar, Don Mirócletes, El hermafrodita dormido, Mi compadre, Salomé, El
Remordimiento, El maestro de escuela, Cartas a Estanislao, Los negroides,
Santander, y el Libro de los viajes o de las presencias. Entre 1936 y 1945 editó la Revista Antioquia, de la cual extractamos estos breves fragmentos( Medellín, Editorial Universidad de Antioquia, 1997).
¡ Eso hacía mucha falta, don Guillermo!